Ayer, jueves, la cofradía aprobaba en cabildo general la petición de la comunidad de padres agustinos de la parroquia de Santa Clara, que solicitaron el traslado de la imagen a dicho templo el próximo mes de noviembre para la realización el día 11 de unos cultos extraordinarios que incluyen un besapiés, una función y un vía crucis. La corporación del Domingo de Ramos ha entendido que estos cultos ayudarán a "acrecentar los lazos espirituales y reavivar la fe cristiana".
Pero también será algo que contribuirá probablemente a incrementar la devoción a tan histórica imagen, lo que constituiría un acto de justicia para quien llegó a gozar de una devoción de nivel similar a la que se brinda hoy, por ejemplo, a Nuestro Padre Jesús del Gran Poder.
Por lo tanto, hay que alabar el acierto de las dos partes: el de los padres agustinos, conocedores y mantenedores de la historia de su congregación en Sevilla; y el de la hermandad, que ha tenido la suficiente altura de miras para ceder la imagen para unos cultos que no por celebrarse entre los muros de un templo y carecer de salida extraordinaria van a dejar de ser memorables para cofrades y devotos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario