LA HORA DE SAN JOSÉ OBRERO

La Hermandad de San José Obrero tiene ya carácter penitencial. La noticia que desde hacía tiempo se veía venir llegó finalmente ayer, cuando varios miembros de la junta de gobierno recogieron en el Palacio Arzobispal las nuevas reglas de una corporación que cuenta desde ahora con una triple condición: penitencia, gloria y sacramental.
Esto quiere decir que son ya 70 las hermandades penitenciales de Sevilla, de las que 60 realizan estación de penitencia a la Catedral. Aún es pronto, en cualquier caso, para considerar a San José Obrero como una de esas diez cofradías que salen en las vísperas, dado que por la premura de tiempo no será hasta 2013 cuando la hermandad realice su primera salida procesional en la jornada escogida, que es el Sábado de Pasión. De momento, este año lo que se celebrará ese día es el vía crucis con la imagen de Nuestro Padre Jesús de la Caridad, culto que excepcionalmente tendrá lugar más tarde de lo habitual.
Por lo tanto, habrá que esperar todavía más de un año para ver nazarenos de azul y blanco por las calles del barrio acompañando al nazareno que talló Fernando Aguado. La Virgen de los Dolores, por su parte, seguirá realizando su salida procesional en septiembre hasta que la cofradía cuente con un cortejo lo suficientemente amplio y formado como para incluir un segundo paso.
En el caso de San José Obrero ha pasado algo parecido que con el Sol o la Misión: hermandades que comienzan siendo de gloria y que van adquiriendo y sumando a su título imágenes pasionistas hasta pasar a obtener el rango penitencial. Llama la atención este aspecto, ya que parece que ser corporación de gloria es sólo una etapa más en el camino hacia la consecución de un objetivo final, que es convertirse en cofradía de nazarenos.
Pero es que en este caso, además, San José Obrero no sólo ha pasado a ser hermandad de penitencia, sino que es doblemente letífica, dado que al titular que da nombre a la corporación y a la parroquia se une ahora San Francisco de Paula, imagen que en 2010 salió a las calles del barrio de manera extraordinaria.
La aprobación de las nuevas reglas por parte del Arzobispado ha provocado una gran alegría en los hermanos y devotos, pero también ha generado reacciones un tanto preocupantes, ya que no son pocos los que han apuntado ya a un nuevo horizonte, la Catedral, como si el carácter penitencial no fuera un fin en sí mismo, sino un paso adelante de cara a alcanzar algo más. Y el Consejo, mientras tanto, sigue sin aclarar si echará el cerrojazo a la Semana Santa con las 60 cofradías actuales, o después de la incorpación de una más, o de dos, o de tres...
En cualquier caso, lo importante ahora es recibir entre las hermandades de penitencia a una corporación que está haciendo las cosas muy bien, que tiene una importante presencia y labor en su barrio, y que sin duda merece todo lo que ha ido alcanzando no sin esfuerzo a lo largo de su trayectoria, algo en lo que desempeñó un papel fundamental el que fuera párroco y director espiritual, el padre Víctor García, fallecido a finales del pasado mes de septiembre.
Bienvenida, por tanto, la Humilde y Fervorosa Hermandad Sacramental y de Gloria de San José Obrero, San Francisco de Paula e Inmaculada Concepción, y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Caridad y Nuestra Señora de los Dolores.