Al final, si el delegado dimitido, Francisco Vázquez Perea, planteó un plan a tres años, el delegado en funciones, que no es otro que el presidente del Consejo, Carlos Bourrelier, ha planteado un plan a dos años, pensando que en junio del año que viene hay elecciones y que a partir de 2017 quizá le toque a otro organizar las jornadas.
Así pues, la Madrugá de este año será muy distinta a la que hemos conocido hasta ahora, pero la de 2016 también. El titular de este texto hace referencia al principal acuerdo de 2015, la recuperación del itinerario histórico del Gran Poder por la Cuesta del Bacalao, Francos, Salvador, Cuna y Orfila; itinerario natural perdido en 1967. Eso sí, el año que viene tendrá que volver a recorrer el Arenal.
Pero, vayamos por partes. La hermandad que abre la jornada, el Silencio, llegará diez minutos antes a la Campana debido a una considerable ampliación del tiempo global de paso de las seis hermandades que hará que el palio de los Gitanos llegue a la carrera oficial más de media hora más tarde que el horario oficial actual.
La cofradía de San Antonio Abad adoptará una única modificación de itinerario para los dos años. Descartado el paso por la estrechez de Daoiz tras la prueba llevada a cabo esta misma semana, la hermandad combinará su itinerario habitual con la modificación prevista. Es decir, que desde Orfila seguirá como siempre por Javier Lasso de la Vega, pero desde ahí girará a la derecha en Amor de Dios para que la Macarena, que tendrá más tiempo de paso, termine de dejar libre Trajano. Por tanto, el Silencio tomará Amor de Dios para seguir posteriormente por San Miguel, Trajano y Plaza del Duque.
El Gran Poder, como decía, seguirá este año al Silencio por la zona del Salvador y Cuna, e incluso por Javier Lasso de la Vega y Amor de Dios, siguiendo por ésta hasta Delgado y Santa Bárbara, para tomar a continuación por Conde de Barajas. Esto hará que entre alrededor de una hora antes de lo habitual, es decir, a eso de las siete de la mañana. Además, al volver por Conde de Barajas, la ida la llevará a cabo por Cardenal Spínola y Plaza de la Gavidia, por donde pasaba hasta ahora en el camino de vuelta. En 2016, sin embargo, el Gran Poder tendrá el mismo itinerario que conocemos por el Arenal y el Museo a la vuelta.
La Macarena ha aceptado renunciar a Cuna y Laraña por este año, cambiando estas calles por Puente y Pellón. Será una renuncia efímera, dado que en 2016 recuperará su itinerario habitual, defendido siempre como irrenunciable.
El Calvario tendrá este año su itinerario modificado hace unos años por Rioja y Velázquez a la ida, en lugar de Murillo y O'Donnell. Sin embargo, para el año que viene la cofradía de la Magdalena tendrá un importante cambio que nada tiene que ver con lo que se ha venido hablando en las últimas semanas, dando por hecho que tomaría por el Museo. Nada que ver. En 2016, el Calvario tomará, desde la Plaza de la Magdalena, la calle Méndez Nuñez, para seguir por Muñoz Olivé, calle completamente inédita hasta ahora para una cofradía de penitencia, y alcanzar así Tetuán y Velázquez hasta la Campana.
Por su parte, la Esperanza de Triana vuelve este año a pasar por Murillo y O'Donnell, al no tener que dejar paso por detrás al Gran Poder. Será, por tanto, la de este año una estación de penitencia más tranquila para la cofradía trianera. Sin embargo, en 2016, que también tomará por Murillo, previamente habrá pasado, desde Reyes Católicos, por Marqués de Paradas, Canalejas y Cristo del Calvario, teniendo así más espacio a recorrer y retrasando el cruce del Gran Poder hasta Canalejas-Gravina, lo que teóricamente debe aliviar a ambas corporaciones.
Finalmente, la Hermandad de los Gitanos rodeará este año las Setas de la Encarnación a la ida, para darle tiempo al Gran Poder a cruzar de Cuna a Orfila, mientras que la Macarena esperará en Alcázares para dirigirse hacia Santa Ángela de la Cruz. Y el año que viene, sin necesidad de dar ese rodeo en la Encarnación, tomará desde Orfila las calles Daoiz, García Tassara, Amor de Dios, San Miguel y Trajano, para que no tenga que comprimirse tanto como hasta ahora para dejar paso por detrás a la Macarena.
A primera vista, en esta colección de modificaciones hay algunas sorprendentes y otras que desde hace tiempo se veían evidentes. Y aunque se mantienen diferentes puntos que ofrecen algunas dudas (¿Tendrá que soportar el Silencio algún parón en San Miguel hasta que la Macarena deje libre Trajano? ¿Sufrirá los Gitanos otro parón en Laraña mientras termina de cruzar el Gran Poder de Cuna a Orfila? ¿Dejará en 2016 la Esperanza de Triana el cruce con el Gran Poder en Canalejas a tiempo?), lo cierto es que a ciencia cierta no se sabrá cómo funcionan estos cambios hasta que no se pongan en práctica.
La buena noticia es, por fin, el acuerdo entre las seis hermandades que ha evitado la vía de la imposición. Ahora bien, la incertidumbre está en saber qué pasará a partir de 2017, si todas las hermandades estarán dispuestas a convertir en permanentes alguno o algunos de estos cambios o qué ocurrirá si llueve alguno de estos dos años. Veremos.
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