domingo, 14 de junio de 2015

ROSARIO VESPERTINO DE NUESTRA SEÑORA DEL DESCONSUELO Y VISITACIÓN


La Hermandad de Pasión y Muerte celebró la semana pasada el rosario vespertino con la imagen de Nuestra Señora del Desconsuelo y Visitación, culto externo para el que la dolorosa de José Antonio Navarro Arteaga estrenó un corazón y una diadema de Orfebrería Giralda, costeados por suscripción popular de hermanos y feligreses.
El cortejo salió de la Parroquia del Buen Aire a las ocho de la tarde, encabezado por cruz alzada y ciriales, seguidos por el estandarte corporativo y, como novedad, el acompañamiento de la Escolanía Nuestro Padre Jesús de las Penas, de la Hermandad de la Estrella.



Tras la presidencia y el cuerpo de acólitos venía la Virgen del Desconsuelo y Visitación llevada en andas por sus hermanos, dirigidos por el capataz de la hermandad, Manuel Vizcaya, y sus auxiliares.
La dolorosa vestía manto de terciopelo burdeos liso con saya de tisú bordada en oro, fajín hebraico, del que pendía un barco en alusión a la advocación de Nuestra Señora del Buen Aire, y un rosario sujeto a sus manos entrelazadas.
Las andas estaban iluminadas por dos candeleros con cera blanca y exornadas por una variedad floral y cromática distribuida tanto en dos jarras como a lo largo del friso, sólo interrumpido por el llamador.
La Virgen del Desconsuelo y Visitación avanzó por las calles de la feligresía con celeridad, aunque no siguió exactamente el itinerario anunciado en los carteles que se veían a lo largo del recorrido.































A las nueve y veinte de la noche llegaba de nuevo la Virgen del Desconsuelo y Visitación a la Parroquia del Buen Aire. Antes de entrar, y para salvar la baja altura de la puerta, las andas fueron desmontadas, dejando la parte de los zancos en la calle y entrando únicamente con la mesa donde va sujeta la dolorosa, junto a las jarras y los candeleros.












A continuación, los hermanos llevaron sobre unas pequeñas ruedas a la Virgen del Desconsuelo y Visitación hasta el presbiterio de la parroquia, donde tuvo lugar el rezo de las últimas oraciones de este rosario vespertino de la Hermandad de Pasión y Muerte.





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