LA LUZ DE SAN ESTEBAN, EN BESAMANOS

Dos días después de su salida procesional, la Virgen de la Luz de San Esteban ha estado expuesta este lunes en besamanos como culminación a los cultos anuales en su honor. Para ello, la Virgen se encontraba ubicada en la Capilla Sacramental de su templo, sobre una peana plateada y ataviada exactamente igual que el sábado, cuando procesionó por las calles de la feligresía de San Esteban, con su característico manto de tisú celeste y toca de sobremanto, además de la corona, ráfaga y media luna doradas.
Flanqueaban a la Virgen dos ángeles mancebos sujetando sendos faroles, así como dos pequeñas jarras doradas con claveles blancos. Además, a lo largo del montaje se dispusieron algunas de las flores que adornaron su paso procesional el sábado. Eran claveles, nardos y gladiolos situados a los pies de la Virgen, además de a ambos lados de Ella y detrás, sobre mesas de madera tallada y dorada. Como detalle, ante la peana se podían ver varias ramas de nardos en el suelo.
Completaban el montaje de este besamanos, en el exterior de la capilla, el simpecado en el lado izquierdo de la reja, y el estandarte corporativo en el derecho.