Antes del quinario que se celebrará la próxima semana, la Hermandad de Santa Cruz expone en besapié desde ayer y hasta las dos de la tarde de hoy, domingo, al Santísimo Cristo de las Misericordias, que se presenta a los devotos en posición vertical ante su propio retablo en el lado izquierdo del crucero de la parroquia.
El crucificado de Pedro Roldán tiene en la base de la cruz diversos lirios morados y está flanqueado por dos ángeles mancebos de madera policromada y estofada que sujetan sendos faroles de orfebrería. Estas tallas se encuentran sobre pequeñas columnas doradas con fuste estriado y capitel corintio, al igual que las jarras del paso de palio de Nuestra Señora de los Dolores que vemos también junto a la imagen, aunque estas últimas son de mayor tamaño. Estas jarras, idénticas a las colocadas en el propio retablo, tienen claveles de color rojo.
Por otra parte, el altar del besapié, que se sitúa sobre una moqueta roja, cuenta también con cuatro blandones dorados con cera color tiniebla; dos detrás del Cristo y otros dos delante, aunque éstos más separados entre sí. Por último, el estandarte de la hermandad se puede ver en el lado izquierdo de todo el conjunto.
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