EL XIV ANIVERSARIO DE LA CORONACIÓN DE LA ESPERANZA DE LA TRINIDAD

Nuestra Señora de la Esperanza, de la Hermandad de la Trinidad, estuvo ayer expuesta a la veneración de los devotos en el presbiterio de la Basílica de María Auxiliadora con motivo del XIV aniversario de su Coronación Canónica, que tuvo lugar en la Catedral el 10 de junio de 2006 (ver).
Para ello, la dolorosa de Juan de Astorga estaba elevada sobre su peana procesional, en la que había diversas ramitas de romero, y lucía la corona de oro de los Hermanos Delgado que el Cardenal Carlos Amigo le impuso en la ceremonia de la Coronación. Además, vestía el manto de terciopelo negro bordado en oro en el siglo XIX por Emilia Salvador y Eloísa Rivera (en señal de luto por los fallecidos por la pandemia del coronavirus), la saya blanca de tisú con bordados también en oro de Juan Manuel Rodríguez Ojeda y una mantilla de encaje sobre la que tenía un puñal y la Medalla de la Ciudad que el Ayuntamiento le concedió a la hermandad el año pasado.
Por otra parte, sostenía un pañuelo de encaje en la mano derecha y un rosario de cuentas negras en la izquierda; además, prendida de la saya tenía la placa y la distinción de la Policía Local de Sevilla, de la que la Esperanza Trinitaria es Patrona.
Junto a la dolorosa se dispusieron dos candelabros de plata con siete velas blancas cada uno, y más hacia los extremos cuatro blandones dorados. Y alrededor había diversas flores blancas y macetas con plantas. Detrás, en el presbiterio alto estaban a la izquierda el guión de la Coronación y a la derecha el estandarte corporativo. Y ante el camarín de María Auxiliadora permanecía montado el altar del triduo sacramental de la semana pasada y de la función en honor a la Santísima Trinidad del pasado domingo, presidido por el conjunto de Padre, Hijo y Espíritu Santo del paso del Sagrado Decreto.
A las ocho de la tarde de ayer tuvo lugar la Eucaristía conmemorativa de la Coronación Canónica, a cargo del director espiritual de la hermandad, Francisco Ruiz Millán; una celebración que se dedicó a la Policía Local, a los hermanos y en general a todas las personas que se han visto afectadas por la pandemia del coronavirus.