La Virgen de la Merced de la Iglesia de San Gregorio se encuentra hoy, jueves, expuesta a la veneración coincidiendo con el día de su festividad. La Comunidad Mercedaria de este templo conventual de la calle Alfonso XII ha celebrado estos días el triduo en su honor y hoy, además del acto de veneración, tendrá lugar a las ocho y media una misa solemne precedida del rezo del Santo Rosario.
Para esta jornada, la Virgen de la Merced ha sido ubicada a los pies de su altar, en la cabecera de la nave del Evangelio, sobre una peana de madera dorada colocada a su vez sobre otra forrada en damasco blanco. Está vestida con el manto blanco bordado en oro que confeccionó en 1980 Guillermo Olivares. Asimismo, lleva una saya de brocado del siglo XVIII, un escapulario bordado en oro y sedas del XIX, y una toca de sobremanto de encaje dorado.
Por otra parte, cuenta con sus habituales elementos de orfebrería plateada: corona, ráfaga, cetro y media luna. En cuanto al Niño Jesús, que lleva unas pequeñas potencias plateadas, viste una túnica blanca bordada en oro y sedas, y sujeta con la mano derecha unos pequeños escapularios de orfebrería.
Junto a la Virgen de la Merced hay cuatro columnas de madera dorada con capitel dórico y fuste acanalado. Dos de ellas, las más bajas, sostienen sendas jarras de plata con diversas flores que también están en un centro a los pies de la Virgen; las otras dos tienen unos candelabros dorados con cinco velas blancas cada uno.
Completan el montaje de este acto de veneración un dosel de terciopelo rojo con una gotera con el emblema mercedario cubriendo el camarín de la Virgen, y dos guirnaldas florales y vegetales en los laterales del retablo.
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