La Hermandad de los Negritos está celebrando en este 2022 el cuarto centenario de la imagen del Santísimo Cristo de la Fundación; pero, además, cumple un siglo su paso procesional, tallado a comienzos de los años veinte del siglo pasado por Francisco Domínguez.
Por este doble motivo, el crucificado de Andrés de Ocampo presidió la semana pasada el quinario en su honor subido ya en su paso, donde permanecerá durante toda la Cuaresma y no se bajará de él hasta que pase la próxima Semana Santa.
El paso, uno de los más personales de la Semana Santa, principalmente por sus cuatro faroles, ocupa el presbiterio de la Capilla de los Ángeles ante un cortinaje negro y entre cuatro blandones dorados con cera color tiniebla y dos jarras sobre sendas columnas. Estos días se le veía con flores moradas y cardos, pero sólo en el monte, ya que para las esquinas, donde habitualmente también se sitúan flores, la cofradía ha contado con la cesión de los cuatro faroles de las esquinas del canasto del Cristo de Burgos.
La celebración de la Hermandad de los Negritos conlleva, por tanto, que ya podamos ver montado prácticamente al completo, a excepción del llamador, el primer paso que nos acerca a la muy esperada Semana Santa de 2022.
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