La Hermandad de la Milagrosa celebró el pasado fin de semana la solemne veneración a Nuestro Padre Jesús de la Esperanza, que fue ubicado para ello en el presbiterio bajo de la parroquia, vestido con la túnica morada y con un exquisito exorno floral compuesto de variadas especies y tonalidades alrededor de sus pies.
Dos de los faroles del paso de palio de María Santísima del Rosario flanqueaban al Señor de la Esperanza, elevados sobre sendos pies de base cuadrada forrados en terciopelo rojo con galones dorados. Detrás, presidía el altar la dolorosa vestida de hebrea ante un cortinaje rojo.
La Virgen del Rosario, que se encontraba sobre una sencilla peana, estaba rodeada por bastantes candeleros con cera blanca y debajo se situaban el sagrario y dos jarras. Además, en los laterales se colocaron dos pequeños doseles que cobijaban otros tantos candelabros con tres velas blancas cada uno y las tallas de los evangelistas que figuran en las esquinas del paso del Señor de la Esperanza; San Juan y San Lucas estaban en el del lado izquierdo, y San Mateo y San Marcos en el de la derecha. Y junto a los doseles, unos guardabrisas.
Por último, el estandarte corporativo estaba situado en el lado derecho del presbiterio alto y la mesa del altar contaba con un frontal con decoración pictórica con el escudo de la hermandad en el centro.
Por otro lado, coincidiendo con la celebración de la solemne veneración, el domingo fue presentado el cartel con el que la Hermandad de la Milagrosa anuncia su estación de penitencia del próximo Sábado de Pasión.
El pintor gaditano José María García Gallardo es el autor de esta obra en la que el Señor de la Esperanza llena prácticamente toda la superficie, mientras que detrás, enmarcados en rojo, vemos a la Virgen del Rosario y un acólito portando un cirial. La rotulación se sitúa en la parte superior, donde se lee "Sábado de Pasión 2022. La Milagrosa".
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