La Hermandad del Santo Entierro celebra este martes la festividad de su dolorosa, María Santísima de Villaviciosa, con una misa solemne que oficiará el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses, a partir de las ocho y media de esta tarde en la Iglesia de San Gregorio.
Por este motivo, la Virgen de Villaviciosa preside el templo en el altar mayor, justo delante de la urna donde recibe culto durante todo el año la imagen del Cristo Yacente. Es por ello que durante el día de hoy podemos ver al Yacente en el retablo de la dolorosa, situado en la nave del Evangelio y bendecido hace nueve años. En concreto, el Señor ocupa la urna situada en la parte inferior del retablo, bajo la hornacina de la propia Virgen, ocupada hoy por la cruz de guía de la hermandad del Sábado Santo. En dicha urna, que siempre se presenta cerrada, se conserva habitualmente un antiguo Cristo Yacente de la corporación.
La presencia provisional del Yacente atribuido a Juan de Mesa en la urna del retablo de la Virgen de Villaviciosa permite contemplarlo de cerca, lo que normalmente es imposible, dada la altura a la que se encuentra su urna del retablo mayor. Es, por tanto, una gran oportunidad la que nos ofrece la hermandad en este día, con el impresionante Cristo Yacente tan cerca de los devotos, algo que sólo ocurre cada Cuaresma en el vía crucis y en el besapié, aunque sin la posibilidad de detenerse demasiado para observarlo con detalle.
Por su parte, la Virgen de Villaviciosa presenta también una estampa muy llamativa, ya que se encuentra vestida al completo de blanco, luciendo el manto de la Coronación Canónica de la Virgen de la Salud de San Gonzalo, así como una saya también de color blanco. Lleva su corona, un fajín rojo, un pañuelo, un rosario y un broche con el emblema de la hermandad. A su alrededor vemos candelabros, candeleros y blandones dorados con cera blanca, y a sus pies un centro floral con diferentes especies de la misma tonalidad.
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