Las obras que el Ayuntamiento de Jerez está llevando a cabo en los alrededores de la Parroquia de San Marcos obligaron a la Hermandad de la Cena a buscar un templo distinto desde el que salir con su paso de palio en la Magna. En un principio se habló de Santiago, aunque las dimensiones del paso llevaron a buscar otra opción, que fue la Iglesia de la Victoria, lo que ofreció estampas muy llamativas de los palios de Santa María de la Paz y Concordia y Nuestra Madre y Señora de la Soledad juntas en el templo de la Porvera. La de instantáneas históricas que nos ha dejado esta bendita Magna Mariana.
Por este motivo, el palio de la Paz y Concordia se unió al trenecito de pasos que se formó en la calle mencionada, cuando en circunstancias normales hubiera salido de San Marcos hacia la plaza Rafael Rivero, como ocurre cada Lunes Santo.
La dolorosa, de la que ahora se apunta una posible autoría de Ignacio López, que parece haber pasado de ser el gran ignorado de la imaginería jerezana al escultor cuyo nombre contribuye a aumentar el prestigio de una talla, acaba de regresar tras un proceso de restauración que ha durado unos cinco meses. Manuel Cobo Carrasco ha sido el responsable de esta intervención que, las cosas como son, no ha convencido a mucha gente por el resultado en la policromía y por las manos nuevas que se le han realizado. La mejora, en cualquier caso, en la mirada y sobre todo en las pestañas es evidente.
El paso de palio de la Cena tiene una presencia imponente. La dolorosa, con esa corona reciente de gran tamaño que sustituyó a la robada hace algunos años, las caídas de plata, el techo y el manto de terciopelo profusamente bordados, la imagen de San Marcos en orfebrería de la delantera, la candelería perfectamente ordenada... En definitiva, un paso de palio muy particular y de gran personalidad que en esta salida estuvo adornado con rosas de color blanco.
El acompañamiento musical corrió a cargo de la Banda del Nazareno de Rota, que por el final de Porvera interpretó "Madre Hiniesta", mientras que al girar en la Puerta de Sevilla hacia Rafael Rivero y Tornería la marcha escogida fue "Esperanza que guía a Triana".
Tras salir de la carrera oficial, la Virgen de la Paz y Concordia tuvo relativamente cerca el regreso a la Victoria, a la que llegó antes que la Soledad. Al día siguiente, la Magna tuvo un epílogo para la Hermandad de la Cena con la vuelta a San Marcos de su dolorosa llevada en su paso, aunque sin el palio para poder pasar por las calles estrechas que las obras obligaron a tomar.
Por cierto, hay que señalar como curiosidad que las dos últimas veces que este paso de palio ha salido a la calle ha sido en el mes de octubre; este año en la Magna y el año pasado para el traslado de la Virgen de la Estrella a la Catedral para su Coronación Canónica (ver).
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