miércoles, 23 de abril de 2025

DOMINGO DE RAMOS 2025 JEREZ: RADIANTE JORNADA DEL REENCUENTRO


Han pasado siete años desde la última vez, el último Domingo de Ramos en Jerez (ver). Ya iba tocando regresar. Tocaba en 2020 y llegó la pandemia. Tocaba en 2023 y fallaron las circunstancias. Y en 2024, y la que llegó fue la lluvia. También este año parecía que la meteorología iba a ponerlo difícil. Moraleja: no hacer demasiado caso a las previsiones con las que los medios sin mucho contenido que ofrecer bombardean en los días y semanas previos.
Y es que, pese a todo, el Domingo de Ramos de 2025 iba a ser todo lo radiante que se espera de este día. El día soñado. La jornada del reencuentro para quien, de niño, el primer día de la Semana Santa se vivía en las calles jerezanas con la ilusión infantil de que algo grande comenzaba. Y lo hacía rodeado de personas, algunas de las cuales ya no están. Porque todo cambia y esa ilusión, aunque permanece, se transforma.
Tocaba este año estar a las puertas del colegio lasaliano de San José para ver salir la Borriquita, que tenía fijada su hora de salida a las cinco menos veinticinco de la tarde, aunque la cruz de guía se puso en camino dos minutos antes. Ya estaba en la calle la Hermandad de Pasión, pero el Domingo de Ramos de la infancia comienza con los nazarenos de túnica y capa blancas, y antifaz de brillante raso azul. Numerosos hermanos conforman el cortejo de esta corporación que el año pasado vivió su LXXV aniversario fundacional (ver) y hace dos la Coronación Canónica de la Virgen de la Estrella (ver).
Tras las filas de nazarenos con palmas en lugar de cirios, los ciriales anunciaron la salida del paso de Cristo Rey en su Entrada Triunfal en Jerusalén, adornado con una variedad de flores de tonos rojizos y con Jesús Sánchez Lineros al frente de la cuadrilla de costaleros.
Antes de salir, durante las maniobras interiores previas a la salida del paso, la Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de la Vera-Cruz de Los Palacios y Villafranca interpretó la marcha "El poder de la esperanza". Luego, en el momento de la salida sonó la Marcha Real, seguida por "Mi Cristo moreno", composición con la que el misterio afrontó la salida a la plaza Nuestro Padre Jesús de la Sagrada Cena tras atravesar el patio del colegio desde la capilla.
En la primera levantá en la calle, el capataz se refirió al Señor como "el rey de la escuela", que emprendió su camino con la marcha "Sagrada Familia", hasta quedar detenido junto al Monasterio de la Purísima Concepción, de las religiosas mínimas. Ahí estaba Alfonso Pérez, hermano número uno de la cofradía y miembro que fue de la primera cuadrilla de costaleros. Por él fue la siguiente levantá, que llevó al misterio de Cristo Rey hasta la puerta de la Parroquia de San Marcos a los sones de "Eucaristía", marcha interrumpida cuando el paso se paró. Ahí estaba una representación de la Hermandad de la Cena junto al párroco, Carlos Redondo, que se encargó de hacer sonar el llamador no sin antes pedir por la feligresía, por las dos hermandades y "por los que esperan la llegada de Jesús y por los que no". En este sentido, subrayó que el Domingo de Ramos viene Jesucristo al encuentro de todos los seres humanos.
Tras la levantá, el paso de misterio continuó hacia adelante, ahora a los sones de la marcha "Pasión, Muerte y Resurrección".
































Los nazarenos cambian las palmas por los cirios en el cortejo de la Virgen, que es en el que se incluye un guión por cada colegio lasaliano existente en Jerez. Y cerrando esta primera cofradía, una bellísima dolorosa de Sebastián Santos Rojas, de la que dicen que le costó mucho desprenderse al imaginero onubense. Pero llegó a Jerez y en ella andando el tiempo acabó por convertirse en una Virgen coronada. Nada menos.
La Banda de Música Maestro Enrique Galán, de Rota, puso sus sones tras el palio azul de la Estrella, tocando el Himno de España en la salida y posteriormente la marcha que ha cumplido cien años en este 2025, "La Estrella Sublime". Con ella, el palio, adornado fundamentalmente con rosas blancas, salió a la plaza, y luego buscó la iglesia de San Marcos con "Como tú ninguna".
También se detuvo la Virgen de la Estrella ante la representación de la Cena. Dos niños, hermanos de esta cofradía del Lunes Santo, tocaron el llamador en una levantá que se dedicó al futuro de dicha corporación. Luego, como guiño a la advocación de su dolorosa, la Estrella se marchó a los sones de "Virgen de la Paz".




























Nos marchamos al barrio de San Pedro buscando a la Hermandad de la Coronación. Varios estrenos presentaba esta cofradía. El más evidente, el cambio de horario, algo que la lluvia impidió poner en práctica en 2024. La Coronación ha sido tradicionalmente la penúltima hermandad de la jornada en pasar por carrera oficial. Sin embargo, buscando evitar una recogida demasiado tardía, la junta de gobierno propuso pasar al segundo puesto, como efectivamente se aprobó.
De esta forma, sólo diez minutos después de comenzar la salida de la Borriquita, iniciaba su estación de penitencia desde la Capilla de los Desamparados la Coronación, cuyo Cristo presidió este año el Vía Crucis de la Unión de Hermandades en la Catedral.
Y en su primer paso encontramos la otra gran novedad que hemos disfrutado con un año de retraso: el cambio de estilo musical; de cornetas y tambores a agrupación musical. En concreto, ha sido la Agrupación de la Sentencia la encargada de poner sus sones al misterio en el que Jesús es coronado de espinas para posteriormente sufrir la burla de quienes lo rodean.
Por la estrecha calle Antona de Dios, rozando los bordillos con los zancos, venía el paso de misterio avanzando con sones como los de las marchas "Dolores y Misericordia" y "Reina del Amor". Posteriormente, el Señor de la Coronación, talla antigua del XVII con figuras secundarias de Álvarez Duarte, salió a la amplitud de la plaza de San Andrés con "La devoción de un barrio". Y con la siguiente chicotá, realizada a tambor, se metió por la calle Compañía de María en dirección a Zaragoza.
































Más atrás llegaba uno de los grandes pasos de palio de Jerez, el de María Santísima de la Paz en su Mayor Aflicción, acompañada por la Banda de Música Maestro Dueñas, de El Puerto de Santa María. De nuevo rosas blancas, salpicadas de otras especies, adornaban el caminar de la Virgen, que salió a San Andrés con la marcha "Regina Pacis".
En la plaza se detuvo para continuar luego a tambor hasta Compañía de María, donde la esperaban miembros del colegio en su camino hacia el inicio de la carrera oficial.
























Esperando en la misma calle Zaragoza a que terminara de pasar la Coronación para situarse justo detrás, encontramos a la Hermandad de Pasión, cuyo único paso continúa progresando en la labor de talla, al tiempo que se estrenaron también algunos ropajes de las figuras secundarias.
El Señor de la Pasión es negado por San Pedro en este misterio tallado por Dubé Herdugo y que recorre una amplísima distancia desde el Centro Parroquial de Santa Ángela de la Cruz en el que tiene su sede. Allí se quedó la Virgen de la Angustia, a la espera de contar algún día con un paso de palio. De momento, la hermandad guarda en su recuerdo la participación de la dolorosa en la procesión Magna Mariana del pasado mes de octubre (ver).
La Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de la Fe, de Martos (Jaén), fue la encargada de acompañar en su estación de penitencia al Señor de la Pasión, interpretando marchas como "Clemencia" o "Eucaristía", ésta cuando ya la cofradía pudo avanzar tras la Coronación buscando la plaza Aladro.
























El Domingo de Ramos discurría y buscábamos a continuación la cuarta cofradía de la jornada, la Hermandad del Perdón. Se trata de una corporación que ha encontrado acomodo definitivo en el día inaugural de la Semana Santa después de haber pasado en su historia por otras tres jornadas distintas: el Sábado Santo fugazmente, el Viernes Santo y la Noche de Jesús.
Pero es en este domingo de ilusiones donde parece estar creciendo esta corporación con sede en la Ermita de Guía, aunque en su cortejo aún podamos ver una representación de la Candelaria debido a los lazos que ambas cofradías mantienen desde que compartieron sede en la Parroquia de Santa Ana.
Desde Porvera, el Perdón alcanza la plaza del Mamelón para entrar en carrera oficial por la calle San Juan de Dios. Por ella venía el paso de misterio en el que Jesús está crucificado entre los dos ladrones. Ambos estuvieron en diciembre en el Ayuntamiento de Sevilla en la exposición "Sevilla Fecit 2024" (ver). 
Fue la imaginera trianera Lourdes Hernández la que aceptó el reto de realizar en 2022 a Dimas y Gestas para acompañar a un crucificado de gran personalidad como es el Cristo del Perdón, obra de Francisco Pinto. Eso sí, quizá la hermandad debería replantearse la colocación de los ladrones en el paso, dado que San Dimas aparece como interactuando con alguien, quizá reprochando a Gestas su actitud, pero la dirección de su mirada no va ni al mal ladrón ni a Jesús.
Tras el paso venía tocando la Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de los Remedios, de Castilleja de la Cuesta, que interpretó por San Juan de Dios la marcha "Amor de Madre". Curiosamente, los títulos de las dos siguientes marchas tras el paso, ya en el Mamelón, fueron "El Amor" y "Madre".


























Y bajo palio, cerrando la cofradía, la Virgen del Perpetuo Socorro, que en aquellos Viernes Santos de la infancia iba a los pies del crucificado en el único paso, muy sencillo, que por entonces tenía la hermandad. 
La Banda de Música Virgen del Castillo, de Lebrija, era la encargada de poner sus sones tras esta dolorosa que se encontraba sin culto en la Catedral cuando la hermandad se fundó. "La sangre y la gloria" fue la marcha que se pudo escuchar en el giro de Porvera a San Juan de Dios, donde más adelante hubo un relevo de costaleros. Posteriormente, sonó "Refugio de San Bernardo" en su camino al Mamelón, con Jaime Racero como nuevo capataz de este paso de palio.
























Se adentraba el palio de la Virgen del Perpetuo Socorro en San Juan de Dios al tiempo que el misterio del Señor del Consuelo, de la Hermandad del Transporte, hacía lo propio por la calle Gaitán. Desde la Basílica de la Merced, la Patrona de Jerez, nos llegaba esta cofradía, mercedaria también en su hábito de nazareno, de blanco y con correa negra.
La cofradía de los transportistas devotos de San Cristóbal presentaba también un estreno musical que tuvo que ser pospuesto por la lluvia del año pasado. La marcha de la Banda del Rosario de Cádiz a Sevilla llevó a la Hermandad del Transporte a contratar para el camino de ida a la Banda de Cornetas y Tambores de la Centuria Macarena, y a la de la Presentación al Pueblo de Dos Hermanas para el camino de regreso.
Por el final de Gaitán, el paso de misterio del Desprecio de Herodes, adornado con rosas rojas, discurrió a tambor hasta que nada más pisar la plaza del Mamelón se produjo un relevo de costaleros. Luego, el largo paso del Señor del Consuelo se levantó y siguió su camino a los sones de la marcha "Sentenciado".



























De blanco mercedario también viste Madre de Dios de la Misericordia, la otra dolorosa de Sebastián Santos que tiene Jerez. En el inicio de la calle San Juan de Dios la conocida popularmente como la Reina del Transporte recibió una saeta desde un balcón.
Después, a las órdenes de Manuel Monge Virués, capataz y hermano mayor de la cofradía, el paso de palio se levantó y se pudieron escuchar las perlas añadidas recientemente a las caídas del palio, como perlas tiene también la saya procesional de la Virgen.
Tras ella pudimos escuchar a la Banda de Música Santa Ana, de Dos Hermanas, que tocó la marcha "Margot" para salir de San Juan de Dios a la plaza del Mamelón, y luego en ésta sonó "Como tú ninguna".
























Y completamos la nómina del Domingo de Ramos con la Hermandad de las Angustias, la cofradía de negro del día, que desde la calle Caracuel alcanzaba la plaza de San Andrés para buscar la plaza Aladro por Santa Rosa. La jornada arrastraba, como es ya tradición, retraso, por lo que la cofradía avanzaba despacio con pequeñas chicotás y largas paradas.
Delante del paso, la Escolanía del Oratorio Festivo, que sigue sonando a lo de toda la vida para este cofrade nostálgico al que las largas paradas le sirvieron para detenerse en los detalles de la Virgen de las Angustias y en su hijo muerto en su regazo.
La hermandad, que en este 2025 celebra el centenario de su reorganización, cuenta además con un paso magnífico de Manuel Guzmán Bejarano, que tiene la particularidad de estar iluminado por unos candelabros de guardabrisa con la apariencia de los candelabros de cola de un paso de palio, pero orientados al revés, como cayendo hacia el interior del paso.
La dolorosa antigua de la cara joven, que no ha estado ubicada este año sobre la peana de madera dorada de las últimas estaciones de penitencia, pudo por fin avanzar y entrar en la plaza Aladro para cerrar la carrera oficial de este flamante día inaugural de la Semana Santa.










































La última cofradía del día comenzaba a recorrer la carrera oficial y la primera emprendía ya el camino de regreso. La Borriquita abandonaba la Catedral, y por Arroyo, José Luis Díez y Limones buscaba ya de vuelta la capilla del Colegio de San José.
Mucha gente esperaba a Cristo Rey a la altura de la Basílica del Carmen, en cuya puerta estaban con sus guiones corporativos las hermandades de la Lanzada y la Virgen del Carmen. Hasta ahí llegó el misterio de la Entrada en Jerusalén con la marcha "Gracias, Señor". El paso se detuvo junto a la puerta de la Basílica para después marcharse a los sones de "Tu cáliz de amargura".














Por su parte, cuando ya la noche había caído sobre Jerez, la Virgen de la Estrella subió la calle Limones mientras sonaba la marcha "Macarena", de Emilio Cebrián. Luego, ya en Carmen, hubo un relevo de costaleros mientras los hombres de la caña se afanaban en encender la candelería, a la que el viento había apagado bastantes cirios.
Culminado el relevo, el paso de palio se levantó a las órdenes de Manuel Serrano y avanzó en triunfo en dirección a la Basílica del Carmen mientras la Banda de Música Maestro Enrique Galán interpretaba la composición "Tú eres el orgullo de nuestro pueblo".



















Un largo camino por delante tenía todavía otra de las hermandades que ya estaba de vuelta tras hacer estación de penitencia en la Catedral. Se trata de la Hermandad de Pasión, que desde la plaza del Arroyo se dirigió a Barranco y Curtidores con el paso de las Negaciones de San Pedro caminando mientras la Banda del Cristo de la Fe de Martos tocaba "XX años junto a ti".
En Curtidores hubo una parada bastante larga. Y es que, aunque no iban por las mismas calles, a partir de la Basílica del Carmen la cofradía de Pasión tenía que ir detrás de la Borriquita hacia Tornería y Rafael Rivero. Cuando ya pudo avanzar, lo hizo con la marcha "En tu buena muerte", llegando con ella casi hasta la plaza Peones, donde hubo un relevo bajo las trabajaderas.



















Nos desplazamos ahora a la inmediaciones de la Catedral para encontrarnos de nuevo con la Hermandad del Perdón, la que tiene más cerca su casa del primer templo de la diócesis. El paso de misterio no tenía llamador. Al parecer, se había roto en la calle Larga y lo llevaba el capataz en la mano.
Cuando el Cristo del Perdón estaba ante la escalinatas del Reducto, arriba se veía el paso de palio mirando en dirección contraria para buscar la calle Cruces y seguir los pasos de su hijo. En este punto, sonaron tras el crucificado las marchas "El Amor", que ya habíamos escuchado en el Mamelón, y "Eucaristía".






















El viento y la amplitud de la zona del Arroyo también apagó unos cuantos cirios de la candelería del paso de palio de la Virgen del Perpetuo Socorro, que tras bajar la calle Cruces pasaba por última vez ante la Catedral, la que fue su casa, a los sones de "Pasa la Virgen de la Soledad".
Poco después, el palio se paró, se aprovechó para encender algunos de los cirios apagados y se produjo un relevo de costaleros. Culminado éste, el paso de palio siguió en dirección al Arco del Arroyo y a la Ermita de Guía con la marcha "Mater servita".





















Con su nuevo horario, la Hermandad de la Coronación iba ya de recogida a horas mucho más tempranas de lo acostumbrado. La calle Arcos fue escenario de todo un recital por parte de la Agrupación Musical de la Sentencia, acallando quizá cualquier duda de quienes no terminarían de encajar este estilo musical con el paso de misterio de la Coronación.
No hubo una sola chicotá a tambor en Arcos. Así, pudimos escuchar marchas como "La trabajadera", "Eres tú mi Señor" o "Tu dulce rostro, Cautivo". Con esta última, el capataz mandó la derecha 'alante' para que el paso girase hacia un joven en silla de ruedas aquejado de alguna discapacidad psíquica. "Para esto salen las cofradías a la calle, para acercar al Señor a todo el mundo, especialmente a los que más lo necesitan", dijo el capataz mientras la madre del chico se emocionaba con el gesto.
Luego la agrupación musical continuó su labor con la marcha "Soberano en su poder", tras la que un hombre le cantó una saeta al Cristo de la Coronación. Las siguientes marchas fueron "Bendícenos, Padre" y "Coronado de Espinas", ésta ya ante la puerta de la Capilla de los Desamparados. Finalmente, el paso entró con "A la niña de mis ojos" y el Himno Nacional.























Por su parte, la Virgen de la Paz en su Mayor Aflicción también recorrió de marcha en marcha la calle Arcos, siendo las últimas hasta llegar al templo "Espíritu Santo" y "Aniversario en la Albarizuela", con la que el paso de palio dio un giro completo hasta quedar dándole la espalda a la puerta. Seguidamente, se acercó a ella algo más a tambor y terminó entrando en la capilla a las doce en punto de la noche.
Pero no fue éste el final definitivo, dado que con la dolorosa ya dentro, la Banda de Música Maestro Dueñas interpretó para despedirse la composición "Ojos de menta y canela".






























Con bastante retraso sobre el horario previsto, volvía a casa la Hermandad de las Angustias, a la que encontramos justo delante de la Parroquia de San Miguel, donde fue recibida por la Hermandad del Santo Crucifijo. Parada ante la representación de la cofradía que abre la Noche de Jesús, la Virgen de las Angustias recibió el rezo de la Salve.
Después, a un ritmo bastante relajado para el retraso que llevaba, el paso tomó la calle Barja, donde se cantó una saeta, y luego se dirigió a la calle Pedro Alonso al no poder pasar por Ramón de Cala por el reciente derrumbe de un inmueble en la zona.
En Pedro Alonso hubo un relevo de costaleros, como lo hubo más adelante ya en la plaza de la Angustias. Finalmente, entró en su capilla prácticamente una hora después de lo inicialmente previsto.




































El Domingo de Ramos estaba llegando a su fin y desde la plaza de las Angustias buscamos a la Hermandad del Transporte de regreso por la calle Ancha y la plaza de Santiago. El paso de misterio estaba ya acompañado por la Banda de Cornetas y Tambores de la Presentación al Pueblo, de Dos Hermanas, más parecida en sus sones que la Centuria Macarena a lo que ha sido habitual en los últimos años con el misterio del Señor del Consuelo. Se notaba en la forma de andar del paso, en los cambios que hacían los costaleros, que dieron el resto en este tramo final de la estación de penitencia.
Marchas como "La promesa", "La valiente" y "Una vida de esperanza" se fueron encadenando junto a la Parroquia de Santiago tras el paso del Desprecio de Herodes, que luego tomó la calle Merced a los sones de "Penas de Triana".































Finalmente, Madre de Dios de la Misericordia, cuyo paso de palio estaba adornado con orquídeas blancas, seguía al Señor del Consuelo mientras la Banda de Música Santa Ana, de Dos Hermanas, interpretaba marchas de corte alegre como "Al cielo la Reina de Triana" o "Esperanza de Triana Coronada" en su camino de vuelta a la Merced.





























Algunos minutos antes de las tres de la madrugada, con la entrada de la Virgen de la Misericordia, finalizaba un Domingo de Ramos muy esperado, el de la ilusión renovada por varias razones. El día en el que afortunadamente no se cumplieron las previsiones meteorológicas más agoreras. Y esto no había hecho más que empezar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario