La Barriada de San Diego vivió ayer la festividad de María Santísima de las Maravillas con la celebración del besamanos en su honor. Así, la dolorosa de Antonio J. Dubé de Luque ofreció a los devotos su mano izquierda en el interior de la capilla que ocupa junto a Nuestro Señor de los Afligidos en la Parroquia de Santa María de la Cabeza.
Para este culto, en el que volvió a emplearse un antiestético foco impactando de lleno en su rostro, la Virgen de las Maravillas se presentó vestida con manto azul y saya burdeos, ambas de terciopelo, además de una toca de sobremanto de malla. Llevaba su corona de orfebrería dorada y varios broches en el pecherín, y sujetaba un pañuelo con la mano derecha y un rosario con la izquierda.
Para este culto, en el que volvió a emplearse un antiestético foco impactando de lleno en su rostro, la Virgen de las Maravillas se presentó vestida con manto azul y saya burdeos, ambas de terciopelo, además de una toca de sobremanto de malla. Llevaba su corona de orfebrería dorada y varios broches en el pecherín, y sujetaba un pañuelo con la mano derecha y un rosario con la izquierda.
La imagen, que se encontraba elevada sobre una peana de madera con decoración pictórica, estaba flanqueada por seis candeleros con velas blancas de gas, tres a cada lado, y a sus pies tenía un centro de diversas especies florales de color blanco que veíamos igualmente detrás, junto al Señor de los Afligidos, quien tenía cuatro cirios rojos junto a él.
Completaba el montaje de este besamanos a la Virgen de las Maravillas la presencia del estandarte corporativo de esta agrupación parroquial del Sábado de Pasión, colocado en el lado izquierdo de la capilla.
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