EL ROSARIO DE SANTA CATALINA, EN BESAMANOS ANTE EL SEÑOR DE LA CENA

María Santísima del Rosario, de la Hermandad del Carmen y Rosario de Santa Catalina, permanece hoy, viernes, y mañana expuesta en besamanos en la Parroquia de San Román como inicio a los cultos en su honor que culminarán con su salida procesional el próximo 1 de noviembre.
Las circunstancias han hecho que por primera vez este besamanos se esté celebrando ante la presencia del Señor de la Sagrada Cena, que desde el traslado de los titulares de su hermandad con motivo de las obras de restauración de la Iglesia de los Terceros se encuentra en el presbiterio alto de San Román, a los pies del retablo mayor.
La Virgen del Rosario está ubicada ante la mesa del altar del templo, sobre la peana de plata procesional de la Virgen del Carmen con dos ángeles en los laterales y una media luna con el emblema carmelita en el centro, a los pies de la imagen. Viste la Virgen manto de brocado de color salmón y saya beige con algunos bordados en oro, así como una larga toca de sobremanto.
Cuenta con la corona y la ráfaga de salida, y un cetro en la mano izquierda, con la que también sujeta un rosario. En la derecha, la que da a besar, no lleva nada. Y en el fajín hebraico que tiene en la cintura podemos ver con un lazo azul y blanco la Gran Cruz del Mérito Marítimo concedida a la imagen en 2014 por la Real Liga Naval Española, institución muy vinculada con la hermandad. Además, en el pecherín lleva diferentes broches, algunos de gran tamaño.
Durante el besamanos la Virgen no lleva en sus brazos al Niño Jesús, que se encuentra en el lado izquierdo, sentado en un pequeño trono de madera y vestido con un traje de color blanco. También al Niño se le puede besar la mano.
A los lados de la Virgen del Rosario podemos ver cuatro candeleros de madera dorada con velas de gas de color blanco, mientras que el exorno floral, compuesto de flores rosas como margaritas y lilium, se reparte entre dos jarras plateadas de su paso procesional colocadas sobre sendas columnas doradas de estilo salomónico y otras cuatro doradas delante y detrás de todo el conjunto.
Se completa el altar de este besamanos con la presencia del estandarte corporativo en el lado derecho, mientras que en el lado izquierdo del presbiterio alto se sitúa un crucifijo entre ciriales.