jueves, 30 de agosto de 2018
LOS TITULARES DEL CALVARIO, BAJO EL CORO DE LA PARROQUIA DE LA MAGDALENA
Dos obras simultáneas en la Parroquia de la Magdalena, una en el altar mayor y otra en la capilla de la Hermandad del Calvario, han obligado durante las últimas semanas a darle la vuelta a la orientación del templo, situando un improvisado altar mayor en la zona del coro, en el extremo opuesto al retablo principal.
En este altar provisional se han ubicado en este tiempo las imágenes titulares de la cofradía de la Madrugá, con el Cristo del Calvario en el centro, Nuestra Señora de la Presentación en el lado izquierdo y San Juan Evangelista en el derecho.
Así han estado hasta hoy, dado que mañana, viernes, ya habrán sido trasladadas al altar mayor, cuyo retablo ha visto culminada la labor de limpieza a la que ha estado siendo sometido. Y allí, como en el verano del año pasado (ver), permanecerán las tres imágenes hasta finales del mes de septiembre, que es cuando se prevé que finalice la intervención en las pinturas murales y las yeserías de la capilla de la hermandad, labor que están llevando a cabo Ana Marín López, Nieves Álvarez Centeno y Teresa González García.
domingo, 26 de agosto de 2018
LA SALUD DE SAN GONZALO DA A BESAR SUS MANOS CON MOTIVO DE SU FESTIVIDAD
Además, ha lucido el manto de tisú blanco bordado en oro y sedas de colores donado el año pasado precisamente para la Coronación por su cuadrilla de costaleros. Javier Sánchez de los Reyes fue el encargado de diseñar el manto, mientras que el bordador y capataz del palio, Luis Miguel Garduño, se responsabilizó de su ejecución.
Completaban la vestimenta de la imagen la saya de tisú de plata bordada en oro a realce por Fernández y Enríquez en 1997 y diseñada por Manuel Guzmán Bejarano, un fajín hebraico y un tocado de encaje.
La mano derecha era la que daba a besar, mientras que con la izquierda sujetaba un rosario. Asimismo, en el pecherín tenía la réplica de la Medalla de la Ciudad, los azahares de oro y diamantes regalados por el cuerpo de acólitos por la Coronación y un alfiler con su advocación. Además, en la cintura veíamos diversas medallas.
Alrededor de la Virgen de la Salud y ante el altar de la hermandad se dispusieron varios jarrones de cerámica con nardos, algunos candeleros con cera blanca y dos pequeñas fuentes también de cerámica en alusión a la advocación de la dolorosa.
Finalmente, en el camarín donde recibe culto durante todo el año la Virgen, junto al Señor en Su Soberano Poder, se encontraba la bandera concepcionista, bordada en oro y sedas sobre tisú celeste por Mariano Martín Santonja en 2017, según el diseño de Francisco Javier Sánchez de los Reyes.
viernes, 24 de agosto de 2018
EL NIÑO DE LA VIRGEN DE LA SIERRA, AUSENTE DEBIDO A SU RESTAURACIÓN
La Virgen de la Sierra se muestra durante este verano en su altar de la Parroquia de San Roque sin el Niño Jesús que habitualmente sostiene en sus manos, dado que se encuentra inmerso en un proceso de restauración a cargo de Rocío Sáez Millán.
Hasta final de verano, esta restauradora licenciada en Bellas Artes intervendrá en la eliminación de algunas grietas que presenta la encarnadura de la imagen, en la sustitución de los brazos articulados y en la limpieza general de este Niño que, como la Virgen de la Sierra, fue realizado por Luis Ortega Bru en 1953. Hay que recordar que el imaginero sanroqueño estaba casado con Carmen León, vecina de Cabra, localidad cordobesa de la que es Patrona la Virgen de la Sierra en la que la imagen de Bru se inspira.
La relación entre la Hermandad Filial de la Virgen de la Sierra y la familia de Ortega Bru es por ello muy estrecha, llegando incluso una hija del artista a asistir a la salida procesional de hace dos años, en la que se recordó al imaginero en el centenario de su nacimiento. Lamentablemente, la lluvia impidió aquella salida (ver).
Hasta que la imagen del Niño Jesús regrese a las manos de la Virgen de la Sierra, podemos verla en su altar sosteniendo un libro, a la manera de otras devociones marianas, como la Virgen del Voto de la Hermandad de Pasión o la Virgen de la O Gloriosa. En este caso, el libro que sujeta es el de "Los primeros viernes" dedicados al Sagrado Corazón.