LA VIRGEN DE LA ANGUSTIA OFRECIÓ SUS MANOS EN LA CAPILLA UNIVERSITARIA

La Hermandad de los Estudiantes culminó este domingo el triduo a María Santísima de la Angustia con la misa solemne en su honor y el posterior besamanos. Por este motivo, la dolorosa de Juan de Astorga se encontraba en el presbiterio de la Capilla de la Universidad, a los pies del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, vestida con el conjunto estrenado hace dos años con motivo del 75 aniversario de la llegada de la imagen a la hermandad.
Se trata de un conjunto formado por un manto azul y saya color corinto, piezas ambas bordadas en oro por el Taller Santa Bárbara. Asimismo, lucía la corona procesional, mientras que en el pecherín tenía una pequeña cruz y un puñal. Del tocado de encaje pendía además una medalla de la Universidad de Sevilla. En la mano izquierda sujetaba un rosario, mientras que era la derecha la que ofrecía a los devotos.
La Virgen de la Angustia estaba elevada sobre una fina peana de plata y flanqueada por dos candelabros con cinco velas blancas cada uno. Más hacia los extremos veíamos dos de las jarras de su paso de palio con rosas, lisiantum, calas y rosas de pitiminí, todas ellas de color blanco. Las jarras, como los candelabros, estaban dispuestos sobre sendos pies de base cuadrada forrados en color rojo y con galones dorados.
Otras dos jarras estaban más adelantadas, junto a la bandera concepcionista, situada en el lado izquierdo del altar del besamanos, y el estandarte corporativo en el derecho. Y dos jarras más se encontraban sobre el banco del altar del crucificado, donde se dispusieron igualmente un total de dieciocho candeleros, nueve a cada lado.
Completaban el altar dos faroles junto al Cristo de la Buena Muerte y una estructura de madera tallada y dorada ante la base de la cruz de la obra de Juan de Mesa, con el escudo de la hermandad pintado en el centro.