La Hermandad de los Estudiantes está celebrando desde ayer en la Iglesia de la Anunciación el triduo extraordinario con motivo del centenario de la corporación. Después del traslado al templo el pasado sábado (ver), el Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de la Angustia se encuentran en la que fue la sede fundacional de la cofradía hasta que este domingo tenga lugar la procesión extraordinaria de regreso de las dos imágenes titulares en sus pasos.
El altar, en distintas alturas, cuenta con el crucificado de Juan de Mesa en la parte más alta, y a sus pies se encuentra la dolorosa sobre la peana procesional de la Virgen del Valle y con un manto y una saya diferentes a los utilizados en el traslado.
Numerosos candeleros con cera blanca flanquean a ambas imágenes. Asimismo, vemos en el montaje del altar varias jarras del palio de la Angustia, dos tallas de ángeles y dos pequeños doseles laterales, con espejos de marcos de madera dorada y otros enseres. Y junto a ellos, los guiones de las distintas facultades que formaron parte del cortejo durante el traslado, la bandera concepcionista y el estandarte corporativo.
A los pies de la única nave del templo se encuentra ya preparado el paso de palio de la Virgen de la Angustia para la salida extraordinaria del próximo domingo, que comenzará a las cinco de la tarde. Esa mañana, a las diez, habrá tenido lugar la función del centenario fundacional.
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