Lo que no se sabe aún es quién de los tres restauradores (Pedro Manzano, Juan Manuel Miñarro y Enrique Gutiérrez Carrasquilla) que presentaron un proyecto de actuación será finalmente el escogido, ya que se aprobó delegar en la propia junta esta decisión.
Hay que recordar que a mediados de los años 90 la hermandad apostó por Miñarro para restaurar a la Virgen de la Caridad, cuya policromía fue aclarada de forma considerable, igual que se espera que ocurra ahora con el titular cristífero de la corporación, primera obra de Luis Ortega Bru (1950) para Sevilla.
La restauración tendrá lugar después de la próxima Semana Santa y es más que probable que la Virgen de la Piedad, con la que el Cristo de la Misericordia conforma un conjunto escultórico, siga sus mismos pasos más adelante.
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