La Virgen se encontraba en el presbiterio de la Capilla de la Fábrica de Tabacos y vestía el manto de salida de Juan Manuel Rodríguez Ojeda y la saya azul de Artesanía Santa Bárbara, además de la corona también de salida de Manuel Seco Velasco. A sus pies lucía una media luna de plata.
El montaje estuvo compuesto del dosel de cultos de la hermandad, ante el que se situaron cuatro ángeles con filacterias moradas y diversas jarras con flores blancas como las que flanqueaban a la dolorosa. En los doseles de menor tamaño donde habitualmente reciben culto los dos titulares de la hermandad se colocaron siete candeleros de cera blanca en cada uno, con sendos centros de flores entre otros elementos.
Por último, a ambos lados de la Virgen de la Victoria había grandes candeleros, además del Simpecado y el estandarte corporativo.
Los cuatro ángeles son atribuidos a Pedro Roldán, en torno al año 1666, y proceden del antiguo paso del Santo Cristo de la Púrpura. Saludos
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