A las siete de la tarde se ponía en camino la cofradía de gloria con titular dolorosa en dirección a la Iglesia de la Beata Ana María de Javouhey, sede de la otra hermandad del barrio, la del Divino Perdón.
Encabezaba el cortejo, tras la Banda de Cornetas y Tambores Pasión de Cristo, una cruz alzada y faroles, tras los que iban niños de la parroquia que este año han realizado su primera comunión. Después iban las representaciones de otras hermandades, como el Carmen de Calatrava, la Candelaria Madre de Dios, la Resurrección de La Rinconada, San José Obrero y el Divino Perdón, a las que seguían la Bandera Concepcionista, el Libro de Reglas y el propio estandarte de la Hermandad de los Desamparados.
La Virgen vestía manto rojo bordado en oro y saya blanca, además de lucir su diadema de salida. En cuanto al exorno floral, estaba compuesto de una hermosa combinación de especies blancas, entre las que destacaban las rosas de mayor y menor tamaño, además de otras flores de tonalidad verde.
La Banda Municipal de Música de Mairena del Alcor fue la encargada de acompañar a la Virgen por las calles del Parque Alcosa. Durante la procesión se estrenó la marcha "Reina de los Desamparados", de Vicente Chazeta Doblas y Javier Calvo Gaviño.
Además, por la recta de la Avenida Ciudad de Chiva sonaron composiciones musicales como "Esperanza Macarena", "Al cielo con Ella" o "Aniversario macareno".
Después quedaba el regreso a la Parroquia de los Desamparados, a la que volvió la cofradía en torno a la una y media de la madrugada, tras una espléndida salida procesional que ha coincidido este año con la festividad de San Fernando.
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