La Hermandad de San Bernardo dio a conocer este jueves su decisión de suprimir (que no suspender) este año la procesión eucarística que tradicionalmente celebra esta corporación cada 14 de septiembre, en la festividad de la Exaltación de la Cruz.
En la breve nota en la que se informa de esta decisión, se indica que fue tomada en un cabildo de oficiales que tuvo lugar el martes y, como es lógico, viene motivada por la situación que padecemos por la pandemia del coronavirus.
Asimismo, se anuncia que próximamente se dará a conocer el programa de los actos que se llevarán a cabo para conmemorar el CDL aniversario de la Hermandad Sacramental de San Bernardo, fundada en 1570, la más antigua de las corporaciones que conforman la actual Hermandad de San Bernardo, que reúne los caracteres sacramental, penitencial y de gloria.
Resulta ahora verdaderamente ingenuo recordar cuando desde el Vaticano se habló, una vez suprimidas las estaciones de penitencia de la pasada Semana Santa, de la posibilidad de celebrar procesiones penitenciales este mes de septiembre, haciéndolas coincidir precisamente con la festividad de la Exaltación. Los más optimistas no querían imaginar que, meses después de aquello, la situación iba a seguir siendo la que es.
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