La Hermandad Filial de la Virgen de la Cabeza ha celebrado este fin de semana su tradicional besamanos coincidiendo con el aniversario fundacional de la corporación, que ha cumplido ya los 91 años de vida. En este acto se ha estrenado la nueva bandera de la Inmaculada Concepción, insignia que ha estado situada en el lado derecho del presbiterio alto de la Iglesia de San Juan de la Palma. Esta nueva obra, bordada en oro y plata sobre tejido moaré celeste, ha sido confeccionada en el taller de bordados Santa Clara y cuenta con un fleco de canutillo de oro entrefino.
El manto azul y la saya blanca, ambas piezas bordadas en oro por el mismo taller y estrenadas en 2016 al presidir el Pregón de las Glorias en la Catedral, son las piezas con las que ha estado vestida la Virgen de la Cabeza. Además, llevaba un rostrillo bordado sobre lamé de oro, mientras que el Niño Jesús ha lucido su mantolín rosa estrenado en la salida procesional del año pasado (ver).
No faltaban el fajín rojo de borlones dorados y un buen número de joyas, como broches y medallas, además de sus atributos habituales de orfebrería, tales como las coronas, la ráfaga y la media luna. Precisamente, en el centro de la media luna había un lazo blanco que unía dos filacterias blancas con letras azules en la que se leía "La que protege, la que embelesa, la que es orgullo de Andalucía". Estas filacterias las sujetaban dos ángeles cedidos por la Hermandad de la Amargura.
La Virgen de la Cabeza ha estado elevada sobre su peana procesional y flanqueada por dos jarras del estilo de cerámica grotesca típica de Andújar, del que había dos ejemplos más entre candeleros detrás de la imagen. Las jarras contenían variadas especies florales. Junto a la Virgen también había dos blandones dorados con cera blanca.
Tras la Virgen de la Cabeza se ubicaban dos imágenes de las santas Justa y Rufina ante un pequeño dosel y entre columnas doradas con candelabros. Y en los laterales había cuatro altas banderas. Las situadas delante, la blanca y la celeste, provienen de la etapa fundacional de la hermandad; la rosa es una donación de una familia devota de hace dos años y la roja ha sido cedida por otra hermandad filial.
Por último, hay que señalar que en los laterales del retablo mayor, presidido por Nuestro Padre Jesús del Silencio, estaban las tallas del Niño Jesús y de San Juanito; y en los extremos del presbiterio se situaron la nueva bandera concepcionista ya mencionada a la derecha y el guión de caminos a la izquierda.
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