La Hermandad de la Resurrección celebró el pasado día 14 de abril el cincuentenario de la bendición de su imagen del Señor Resucitado con una misa que fue presidida por el delegado diocesano de Hermandades, Marcelino Manzano. Lo llamativo es que la celebración eucarística tuvo lugar en la capilla del Colegio La Salle-La Purísima, donde la hermandad se fundó en 1969, obteniendo en 1972 la aprobación de sus reglas.
De esta forma, el Señor volvió a su casa, la que lo fue hasta su traslado a la Iglesia de Santa Marina en 1987. Para ello, fue llevado de forma privada la noche del día 13, mientras que el sábado presidió las comuniones de los niños del colegio y el domingo tuvo lugar un besapié extraordinario.
El Señor de la Resurrección fue situado para estos cultos de su L aniversario en el presbiterio alto de la capilla del colegio, ante la imagen de la Inmaculada Concepción que, por cierto, presidió en la Catedral la Vigilia de la Inmaculada en 2012 (ver). Estaba elevado sobre su habitual peana dorada y lucía las potencias de plata sobredorada realizadas hace cincuenta años por Jesús Domínguez, inspiradas en las del Gran Poder de 1915.
Flanqueaban al Señor dos columnas salomónicas sobre las que había claveles y margaritas de color rojo, mientras que más atrás, junto al altar iluminado por diversos candeleros con velas blancas de gas había otras dos columnas con flores blancas. Asimismo, veíamos varias bandejas de plata y dos relicarios, entre ellos el que tiene una piedra del Santo Sepulcro de Jerusalén. Finalmente, en el lado izquierdo del presbiterio estaba el estandarte corporativo y en el derecho la bandera fundacional de la Asociación La Salle, origen de la hermandad.
Pasado el fin de semana, el Señor volvió a Santa Marina, aunque en las próximas semanas será trasladado al taller de Pedro Manzano para ser sometido a una restauración. Mientras tanto, Nuestra Señora de la Aurora preside el templo desde el altar mayor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario