jueves, 23 de noviembre de 2023

LA CARIDAD DEL BARATILLO REGRESÓ A SU CAPILLA DESDE LA IGLESIA DE SAN JORGE


La Hermandad del Baratillo celebró el pasado domingo la función principal en honor a María Santísima de la Caridad en su Soledad en la Iglesia de San Jorge, del Hospital de la Caridad, a la que había sido trasladada la noche del sábado, tras el último día del triduo.
La Sociedad Filarmónica Nuestra Señora del Carmen, de Salteras, se encargó de acompañar a la dolorosa en su camino de vuelta a la capilla, que se inició tras la función en torno a las doce y cuarto del mediodía. Desde la calle Temprado, el cortejo tomó Santander y Tomás de Ibarra para alcanzar el Postigo del Aceite, donde la Virgen de la Caridad se paró ante la Capilla de la Pura y Limpia.
Vestía manto burdeos y saya azul, ambos de terciopelo bordado en oro, y lucía su corona de salida. Las andas contaban con diez candeleros, los candelabros de los costeros de su palio en las esquinas delanteras y dos pequeños faroles en las traseras, mientras que el exorno floral se componía de claveles blancos en el friso y en dos jarritas también del palio.
Desde la Pura y Limpia, la Virgen de la Caridad buscó la calle Arfe a los sones de "Esperanza que guía a Triana", a la que después siguió la marcha "Nuestra Señora de Guadalupe", que fue interrumpida cuando las andas se detuvieron para que hubiera un relevo de los cofrades que portaban a la dolorosa.















La Virgen de la Caridad siguió avanzando por Arfe mientras la Banda del Carmen interpretaba "Sé siempre nuestra Esperanza", a la que siguió después "Pasa la Virgen Macarena" para discurrir por la Puerta del Arenal y llegar hasta el inicio de la calle Adriano.



























Con "Siempre la Esperanza", la dolorosa de Fernández-Andes llegó hasta la puerta de la capilla y, sin detenerse, comenzó a girar con "Caridad del Guadalquivir". Las andas se pararon, los cofrades se dieron la vuelta y la Virgen entró en su capilla con el Himno de España faltando tres minutos para las dos menos cuarto de la tarde.



















Una vez dentro, la Virgen se paró en el centro de la capilla, se rezaron las oraciones finales y posteriormente se ubicó en el presbiterio alto, cerrándose así el traslado de vuelta. Para terminar los cultos tradicionales de noviembre en honor a la Caridad sólo falta el besamanos que tendrá lugar el próximo domingo.



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