Si el pasado día 10 la imagen de María Santísima Madre de la Iglesia, de la Hermandad de la Redención, era trasladada al Convento de Capuchinos (ver), el sábado salió una vez más a la calle, ahora para su participación en la Magna Mariana. Y lo volvió a hacer en el paso de palio de la Hermandad de la Yedra de Écija, con el manto de la Vera-Cruz de El Puerto de Santa María y con una saya de la Hermandad del Nazareno del Amor de Cádiz.
Como la Virgen de las Mercedes (ver), que también salió del convento de la calle Sevilla (sede curiosamente de dos hermandades que no participaron en la Magna, como son la Defensión y la Mortaja), la Madre de la Iglesia recorrió la Alameda Cristina en su camino hacia la plaza de la Asunción por la estrechez de Tornería. Empezaba ya a acumularse retraso por este punto, por lo que el palio tuvo que esperar un rato antes de poder avanzar, lo que hizo posteriormente mientras sonaba la marcha "Rosario de Monte-Sión".
Precisamente, en el aspecto musical hay que mencionar que hubo un cambio de banda respecto al traslado del día 10. Así, si entonces fue la Banda de Agripino Lozano la que acompañó a la dolorosa de Juan Ventura, en la Magna la encargada de hacerlo fue la Banda de Música Virgen del Rocío de Málaga; procedente, por tanto, de la capital de la Costa del Sol, como la que fue con la Virgen de Loreto (ver).
De nuevo, la dolorosa que aún espera su momento en las calles cada Jueves Santo, recorrió el centro de Jerez gracias a esta Magna Mariana, que para los cofrades de la Redención terminó entre banderas y colgaduras que adornaban el último tramo de su emocionante trayecto procesional. Y de nuevo, el cortejo estuvo precedido por el simpecado de la Archicofradía de María Auxiliadora Coronada de Sevilla, como símbolo de unión entre dos corporaciones salesianas.
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