De hecho, el nuevo edificio estará adosado a los muros de la iglesia del antiguo Convento del Valle, en un terreno que fue cedido en mayo de 2008 a la hermandad por parte del Ayuntamiento, y que contribuirá a adecentar lo que hoy es un descuidado solar que comunica las calles Verónica y Sol, y que cada Sábado Santo atraviesa en su itinerario de vuelta la Hermandad de la Trinidad.
En el templo ha estado expuesta estos días la maqueta de la futura casa hermandad, junto a diversos planos que permiten que todos los hermanos se hagan una idea de cómo será su nueva sede administrativa y social.
En la descripción que se hace del edificio, la web de la Hermandad de los Gitanos explica lo siguiente: "Por lo que respecta al interior, propone contener la modulación de los espacios, proponiéndose como lugar referencial y simbólico –único en doble altura- la exposición de pasos, cuya percepción también se hace posible desde el templo, a modo de capilla lateral. En
cuanto al funcionamiento de la casa hermandad, se propone la
distribución de espacios en torno a dos núcleos verticales de
comunicación, uno de carácter más institucional, destinado a acoger
dependencias a las que potencialmente acudirá un público que no
necesariamente pertenece a la Hermandad, y otro de carácter más interno,
asociado a las labores cotidianas de la Hermandad. Ambos núcleos cuentan
con acceso directo e independiente desde el exterior y llevan asociados
los correspondientes aseos. La relación entre estos núcleos se articula
en la planta primera a través de una galería volcada sobre la
exposición de pasos, mientras que en la planta ático se funden en un
espacio diáfano y transparente, con terrazas en sus extremos, apto para
acoger actividades múltiples y la cafetería".
Está previsto que las obras, con un presupuesto de más de 700.000 euros financiados mediante préstamo hipotecario (con la casa de la calle Socorro como aval), comiencen dentro de unos ocho meses, una vez realizados los trabajos previos destinados a la obtención de los correspondientes permisos y demás aspectos burocráticos. A ese tiempo habrá que sumar los diez meses previstos de duración de las obras.
Hay que recordar que en el momento de la cesión del terreno, el Ayuntamiento puso como condición que la edificación se llevara a cabo en un plazo máximo de cinco años a contar desde junio de 2010, cuando el Consistorio aprobó el plan especial de protección de la zona incluido dentro del Plan General de Ordenación Urbana.
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