domingo, 3 de mayo de 2015

SACRA HÍSPALIS: "LA MEMORIA DE LOS TIEMPOS (II)"


El próximo viernes 8 de mayo tendrá lugar una nueva edición de la serie de itinerarios culturales y religiosos "Sacra Híspalis", que dirige Irene Gallardo. En esta ocasión, tiene como título "La memoria de los tiempos (II)", y constará de sendas visitas a la Iglesia de San Hermenegildo y al Convento de Capuchinos, situados a uno y otro lado de la Ronda Histórica, a la altura de la Puerta de Córdoba.
Así explica la propia Irene Gallardo este nuevo itinerario: "El V. P. Cristóbal Suárez de Ribera es quien funda en Sevilla la capilla o ermita de San Hermenegildo, construida entre 1607 y 1616. La Hermandad tuvo con anterioridad hospital y capilla dedicada al Santo Rey, ubicado entre las calles San Julián y Azofaifo. En 1587, con la reducción de hospitales, la Corporación crea en él dos casas para alquilarlas, pero por la santidad que poseía el lugar, se instalaron en ellas muchos sacerdotes y devotos, siendo tan numerosos los moradores que el Duque de Alcalá, alcalde perpetuo de las torres de las murallas de Sevilla y hermano mayor de la Cofradía, otorgó las torres para agrandar las habitaciones. En la torre de la Puerta de Córdoba, adherida a la iglesia, se encuentra el calabozo donde el primer Rey de Sevilla sufrió martirio y entregó su vida por amor a Cristo.
El Convento de Capuchinos fue el octavo que se fundó en la provincia de Andalucía, a instancias del Arzobispo Don Diego de Guzmán y Benavides. Para la ubicación del convento se les entregó la capilla dedicada a las Santas Justa y Rufina, patronas de la ciudad, frente a la Puerta de Córdoba. Dicho recinto sagrado se erige en 1627, según cuenta la piadosa tradición popular, en el lugar donde murieron las Santas Justa y Rufina. Se consagra a dichas mártires y patronas este cenobio de menores capuchinos en 1630. En tiempos de la invasión francesa, el convento se convirtió en hospital, teniendo los frailes que poner a salvo las obras de Murillo que se ubicaban en el altar mayor y en otros laterales en Gibraltar. Las pinturas regresan a la ciudad en 1812, pasando definitivamente al Museo de Bellas Artes de Sevilla. En 1837, los capuchinos padecen la desamortización, volviendo a ser un hospital dicho recinto sagrado. Tras el regreso de los frailes, por mediación del Superior de los Capuchinos D. Joaquín María de Llavaneras, en 1889 el Arzobispo de Sevilla les otorga la iglesia y el convento, cuyo inmueble se hallaba en ruinas y saqueado.
Entre esos benditos muros convivieron con los hermanos capuchinos Fray Diego José de Cádiz y Fray Isidoro de Sevilla, que en el coro bajo de la iglesia conventual vio a la Santísima Virgen ataviada de Pastora, tal como encargó pintar al onubense Miguel Alonso de Tovar.
Vestigios de la historia, Capuchinos y San Hermenegildo, que siguen en pie pese a los envites de los tiempos y de la vida, y que hoy "Sacra Híspalis" les propone visitar recuperando la memoria de los tiempos".
El punto de encuentro de este nuevo itinerario será el Convento de Capuchinos, a las seis y media de la tarde. Tiene una duración de tres horas y las inscripciones se deben realizar a través de la dirección de correo electrónico sacrahispalis@gmail.com.

No hay comentarios:

Publicar un comentario