jueves, 29 de febrero de 2024

ESTRENOS Y RESTAURACIONES 2024


Es ya imprescindible acudir cada Cuaresma a la sede del Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla, en la calle Sierpes, para contemplar la exposición que reúne los principales estrenos que las hermandades van a presentar en sus estaciones de penitencia de la próxima Semana Santa. Hablamos tanto de obra nueva como de restauraciones.
Este año son veintidós las corporaciones penitenciales que participan en la muestra, que está repartida entre el patio del edificio y una de sus salas. Como es habitual, repasamos todo el contenido expositivo, empezando precisamente por el patio y por el nuevo manto procesional de la Virgen de la Quinta Angustia. Es una obra diseñada por Francisco Javier Sánchez de los Reyes que ha sido bordada en oro sobre terciopelo azul por el taller de Santa Bárbara.





Al lado vemos los nuevos respiraderos de orfebrería del paso de palio de la Virgen de las Tristezas, de la Hermandad de la Vera-Cruz. Orfebrería Villarreal ha ejecutado en metal repujado y plateado estos respiraderos que han sido diseñados por Francisco Villarreal Reina y Benjamín Domínguez Gómez. También son nuevos los faldones, de terciopelo negro bordado en oro por Charo Bernardino.







Por su parte, la Hermandad de Jesús Despojado estrenará la cruz de guía, obra de madera tallada, dorada, barnizada y pintada. Francisco José Verdugo se ha encargado de la talla, los Hermanos González del dorado y Manuel Mazuecos de las pinturas.





En el caso de la Hermandad de la Amargura, hablamos de una restauración; la de las bocinas, que fueron realizadas por Concepción Fernández del Toro en el bordado y Cayetano González en la orfebrería. La restauración de estos enseres, que combinan el terciopelo rojo bordado en oro, plata y sedas, el marfil tallado y la plata repujada, ha correspondido al taller de Santa Bárbara, a Sila Restauración y a Sergio Guzmán.






Otra novedad de 2024 serán unos faroles de la Hermandad de la Esperanza de Triana, labrados en plata repujada por Ramón León.




Por otra parte, la Hermandad de la Macarena estrenará la restauración de dos varas de consiliarios, realizadas por Manuel Seco Velasco en 1967 e intervenidas ahora por Jesús Domínguez.



Al lado encontramos el guión sacramental de la Hermandad del Beso de Judas, obra anónima del siglo XVIII de tisú de plata, raso burdeos y bordados en oro y sedas. Joaquín Salcedo ha sido el restaurador de esta pieza.



Volvemos a la Hermandad de la Vera-Cruz, para la que María Gema Pérez Morales ha restaurado una saya de terciopelo negro bordado en oro del taller de Nuestra Señora de la Concepción con diseño de Joaquín López (1988).


Otra saya restaurada es la de María Santísima de los Dolores, de la Hermandad de las Penas de San Vicente. Es de terciopelo rojo bordado en oro y la hizo en 1969 el taller de Sobrinos de Caro con bordados anteriores de Patrocinio López. Ahora ha sido restaurada por Manuel Mendoza y Salvador Aguilar.


La Hermandad de San Esteban presentará el próximo Martes Santo varios estrenos que forman parte de la exposición. El primero que encontramos es el nuevo guión de San Juan de Ribera, diseñado por Rafael de Rueda y bordado en oro y sedas sobre terciopelo granate por Joaquín Salcedo.



Y la última pieza expuesta en el patio del Mercantil es el guión sacramental de la Hermandad del Santo Entierro, una obra anónima del siglo XVII restaurada por Juan Areal y Carmen Galán.



En la sala situada junto al patio vemos en primer lugar un maniquí vestido de Armao de la Macarena, dado que se estrenará una nueva coraza labrada por Jesús Domínguez.




Hablamos de nuevo de la Vera-Cruz, que contará para su paso de Cristo con una nuevas bases de los guardabrisas, realizadas en metal repujado y plateado por Orfebrería Villarreal.


A su lado se muestra el nuevo banderín de San Bernardo de la hermandad del mismo nombre, una insignia diseñada por Francisco Javier Sánchez de los Reyes con orfebrería de Ramón León, bordados en oro sobre terciopelo morado de Jesús Rosado y una pintura de Rafael Amadeo Rojas-Álvarez.


Seguimos en el Miércoles Santo, ahora con la Hermandad de las Siete Palabras, cuyo paso de palio estrenará el bordado de las caídas laterales, bordadas en oro sobre terciopelo burdeos por Jesús Rosado.





El Santo Entierro contará también con una nueva bandera de raso rojo y negro con asta de latón repujado. Ha sido realizada por Carmen y María de las Mercedes Galán.


A continuación, vemos uno de los varales del paso de palio de la Virgen del Sol, diseñados por José Manuel Bonilla Cornejo y realizados en madera barnizada y metal repujado y plateado. Los nuevos apliques de orfebrería corresponden a Manuel de los Ríos, de Orfebrería Andaluza.




Una segunda novedad en San Esteban será la restauración del Guión del Costalero, de terciopelo burdeos y tisú de plata bordado en oro en 1995 por Francisco Carrera Iglesias. La restauración ha sido responsabilidad de Joaquín Salcedo.


Otro estreno de la Esperanza de Triana será una nueva toca de sobremanto que el taller de Sucesores de Esperanza Elena Caro ha confeccionado en malla de oro bordada en el mismo metal. El diseño es de Gonzalo Navarro.


Como ya comentamos el pasado mes de octubre (ver), el paso de palio de María Santísima de Regla, de la Hermandad de los Panaderos, irá antecedido por un nuevo juego de ciriales de plata repujada y fundida diseñados por Fernando Aguado y labrados por Orfebrería Andaluza.




Pasamos a la Hermandad del Buen Fin, que sigue con la restauración de su paso de palio. En la exposición podemos ver una de las bambalinas laterales, de terciopelo azul bordado en oro y sedas de colores por Sobrinos de Caro, y con tallas de madera tallada y policromada de Antonio Castillo Lastrucci (1930). Las caídas fueron diseñadas por Ignacio Gómez Millán y ahora se han encargado de su restauración Manuel Solano y Carmen Bahima.










Por su parte, la Hermandad de San José Obrero estrenará una toca de sobremanto para la Virgen de los Dolores, diseñada por Manuel Muñoz Varón y bordada en oro y plata sobre malla de oro por Antonio Ugía Ruiz.


Y de nuevo hablamos de la Hermandad de San Esteban, que en su cortejo tendrá una nueva bandera morada de raso bordado en oro. El diseño es de Rafael de Rueda y el bordado es de Soldán.



En Montserrat la novedad de 2024 será un juego de ciriales de metal repujado y plateado de Orfebrería Hermanos Ramos.




Uno de los estrenos más llamativos de este año serán los nuevos respiraderos del paso de misterio de la Hermandad de la Misión, diseñados por José Manuel Bonilla Cornejo y realizados por los Hermanos Caballero en madera tallada y barnizada con varias tonalidades, incluyendo el color verde. También serán nuevos los faldones, confeccionados en terciopelo morado por Álvaro Roiz Domínguez.









La Hermandad de la Sed, por otro lado, presentará la restauración de los candelabros de cola de su paso de palio. Orfebrería Andaluza ha intervenido esta obra de José Manuel Ramos de 1980.





Otra novedad es la restauración del manto de salida de la Soledad de San Lorenzo, obra de las Hermanas Antúnez bordada en oro sobre terciopelo negro, restaurada ahora por Cyrta.







La Hermandad de San Bernardo tendrá otra novedad, el remate de una bandera con la efigie de Santa Bárbara labrada en plata repujada por Ramón León.


En la Lanzada el estreno será un pañuelo del siglo XIX de batista y encaje de Carrickmakross, de autoría anónima.


Por otro lado, la Virgen de los Dolores de la Hermandad del Cerro estrenará la restauración de un puñal de plata repujada, sobredorada y joyería que en 1960 hizo Manuel Seco Velasco. Su restauración se debe a Joyería El Toisón.


Y de la misma hermandad son una nuevas potencias de plata de ley repujada y sobredorada para Nuestro Padre Jesús de la Humildad, obra de Ramón León.


Y llegamos al final con dos de las nuevas jarras del paso de palio de Nuestra Señora del Sol, diseñadas por José Manuel Bonilla Cornejo y realizadas en metal repujado y plateado por Orfebrería Andaluza.




Aún quedan algunos días, hasta este domingo, para ver de cerca y con todo detalle estrenos que después, con las cofradías en la calle, será más difícil observar con el detenimiento que exposiciones como ésta permiten.