La Hermandad del Amor le ha dado al apóstol Santiago, que es titular de la corporación del Domingo de Ramos, una ubicación definitiva dentro de la Iglesia del Salvador. En concreto, la imagen de Santiago, que figura en el paso de misterio de la Sagrada Entrada en Jerusalén, preside ahora la que se conoce como la antigua Sacristía de los Capellanes, ubicada a los pies de la nave de la Epístola, tras el retablo de las Santas Justa y Rufina.
El retablo neoclásico de este enclave contaba con una imagen de la Virgen Milagrosa, y antes con una de San Miguel, mientras que Santiago, acompañado de San Pedro, solía estar junto al Señor de la Entrada en Jerusalén en los laterales del que es el antiguo retablo de San Crispín y San Crispiniano, junto al Cristo del Amor. Pero también ambos apóstoles han llegado a estar en algunos momentos en la propia Sacristía de los Capellanes, pero en los laterales, de forma que prácticamente no se veían desde el exterior. Ahora, sin embargo, la Hermandad del Amor ha decidido darle un lugar más destacado a su santo titular, que lo es desde que la cofradía se encontraba en la Iglesia de Santiago, su sede fundacional.
La Sacristía de los Capellanes, que ahora la hermandad quiere que se conozca como Capilla de Santiago, forma parte de las dependencias que tiene cedidas por parte de la Archidiócesis de Sevilla, y quiere ser lugar de paso obligado para los peregrinos que inicien desde la capital hispalense el Camino de Santiago. De hecho, son muchos los que recogen la credencial del camino en la propia hermandad.
Por su condición de patrón de España, el apóstol Santiago, obra atribuida al círculo de Pedro Roldán, tiene en el lado izquierdo de su nuevo retablo una bandera de España, situada ante un cuadro del Santísimo Cristo del Amor, mientras que en el derecho, ante un cuadro de Nuestra Señora del Socorro, está el guión de Santiago, insignia incluida en el cortejo de la Entrada en Jerusalén.
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