La Plaza de la Virgen de los Reyes acogió anoche, en la víspera del Día de la Virgen, un concierto extraordinario a cargo de la Banda Sinfónica Municipal de Sevilla, dirigida de forma magistral y entusiasta por Francisco Javier Gutiérrez Juan.
En esta ocasión, el programa estuvo compuesto por piezas relacionadas con el colectivo gitano. De hecho, el concierto fue titulado como "Corazón gitano", que era el nombre de la primera obra que se pudo escuchar, obra de José María Martín Domingo, un reconocido compositor especialmente de pasodobles.
Siguió el concierto con "Suite gitana", del sevillano Manuel López-Quiroga y Miguel. La obra, de 1952, consta de tres partes ("Interludio", "Danza del Velorio" y "Bolero"), que fueron interpretadas por la Sinfónica Municipal.
A continuación, tuvo lugar la interpretación de "Agustín El Herrador", de Francisco Grau Vegara, quien se la dedicó al suegro del director de la Banda Sinfónica Municipal en 2009, año en que esta formación la estrenó durante el concierto de la víspera del Corpus.
La primera parte del concierto se cerró con "Reminiscencia gitana", del belga André Waignein (1994). Ésta ha sido la primera vez que la Sinfónica Municipal ha interpretado esta pieza, como también ocurrió con la obra que abrió la segunda parte del concierto, "Gitana del Albaicín", de Pascual Marquina (1931), dedicada al comandante Carlos López Ochoa.
Finalmente, el concierto concluyó con "El amor brujo", de Manuel de Falla (1915), con sus seis partes: "Canción del amor dolido", "El aparecido", "El círculo mágico", "A media noche", "Canción del fuego fatuo" y "Pantomima". Para esta conocidísima obra, la Banda Sinfónica Municipal de Sevilla contó con la colaboración de la cantante Lola Vega, nacida en Trebujena y ganadora de multitud de premios de canción española. Es además directora de la Escuela Municipal de Música de Trebujena y saxofonista de la Banda Municipal de Música de Jerez de la Frontera. Asimismo, hay que señalar que la adaptación para banda de "El amor brujo" fue realizada expresamente para la Sinfónica Municipal por José Albero Francés, quien fuera su director durante muchos años.
El concierto extraordinario de víspera de la Virgen de los Reyes, que fue presentado por Cayetano Sánchez Aragón, finalizó con un pasodoble que Francisco Javier Gutiérrez Juan quiso dedicar al público presente en el concierto, al que animó a acompañar a los músicos con las palmas.
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