BESAPIÉ AL CRISTO DE LA EXALTACIÓN EN LA CAPILLA SACRAMENTAL DE SAN ROMÁN

La Hermandad de la Exaltación celebra este fin de semana el besapié a su crucificado titular; un culto que por primera vez desde que la cofradía se encuentra residiendo provisionalmente en San Román tiene como escenario la Capilla Sacramental del templo.
En este caso, este traslado desde el presbiterio, lugar habitual de los besamanos y besapiés de la hermandad, hasta el Sagrario obedece a la instalación ante el retablo mayor del altar de cultos de la Virgen del Subterráneo, de la Hermandad de la Cena, que también se encuentra desde septiembre en San Román por obras en Los Terceros.
Precisamente, la Hermandad de la Cena ha cedido a la de la Exaltación su dosel de cultos para que sirva de marco al besapié al Cristo atribuido a Pedro Roldán, que está en posición vertical, con la base de la cruz oculta por una pieza de terciopelo morado con un cíngulo morado.
Flanquean al Santísimo Cristo de la Exaltación un total de cuatro candeleros con cera color tiniebla, dos a cada lado, mientras que detrás, entre la imagen y el dosel, hay dos blandones dorados también con cirios del mismo color y cuatro jarras del paso de palio de la Virgen de las Lágrimas con lirios morados y otras flores de color rojo, las mismas especies que vemos delante de los escalones que permiten el acceso de los devotos para besapie el pie. Dos de esas jarras están sobre sendos pies de base cuadrada forrados de damasco morado con galones dorados, y las otras dos se elevan en columnas de madera dorada y policromada con fustes de estilo salomónico.
En los extremos de la capilla vemos a la Virgen de las Lágrimas, con su corona procesional, y a San Juan Evangelista. Ambas tallas tienen ante sí unas mesas de madera dorada con cuatro candeleros, dos pequeñas jarras y un candelabro plateado cada una.

Por otro lado, mientras que la Virgen del Subterráneo preside su altar de cultos, el Señor de la Sagrada Cena y el Cristo de la Humildad y Paciencia se encuentran juntos en el altar provisional de la Exaltación, en la nave de la Epístola.