Nuestra Señora de la Alegría ejerce hoy, Domingo de Resurrección, de eslabón devocional que une la penitencia de la Semana Santa con la gloria del tiempo letífico que está por llegar. Durante la jornada de hoy y mañana, Lunes de Pascua, la imagen se muestra en besamanos en su capilla, donde estrena para este culto un nuevo manto de brocado de tonalidad anaranjada.
Durante este besamanos, la Virgen de la Alegría se encuentra a los pies de su camarín, sobre las escaleras de acceso a éste y elevada en la peana procesional plateada que simula una nube. Luce toca de sobremanto bordada sobre malla y la saya de tisú procesional, también bordada en oro.
Sobre la cabeza tiene la corona procesional y también se pueden ver la ráfaga y la media luna de orfebrería con las que suele salir a las calles de la feligresía de San Bartolomé en el mes de mayo. El Niño Jesús, por su parte, lleva también su trajecito de tisú y la corona de salida.
A lo largo del altar se han dispuesto diversos candeleros plateados con cera blanca, además de dos columnas de cerámica que flanquean a la Virgen y en las que se apoyan dos jarras plateadas con diversas especies florales de distintos colores.
Detrás, en el retablo principal de la capilla, hay otras dos jarras y dos centros con las mismas flores. Preside el camarín el simpecado de la hermandad. Finalmente, en los extremos del altar del besamanos se han colocado sobre sendas mesas de madera dorada y entre pequeñas velas blancas las tallas de San Juan Evangelista y San Fernando que forman parte del patrimonio de la Hermandad de la Alegría. Precisamente, la capilla que ocupa la Virgen en el interior de la Parroquia de San Bartolomé está dedicada a San Juan.
Magnífico reportaje.
ResponderEliminarMuchas gracias.
Gracias por sus palabras. Me alegra que le haya gustado.
Eliminar