María Santísima del Dulce Nombre, de la Hermandad de la Bofetá, se encuentra expuesta en besamanos desde hoy, viernes, hasta el próximo domingo. En esta ocasión, este culto se celebra en el interior de la capilla sacramental de la Parroquia de San Lorenzo, perteneciente a la Hermandad de la Soledad.
Allí vemos a la dolorosa del Martes Santo sobre la peana de madera dorada habitual de los besamanos y vestida con su manto de salida, de Juan Manuel Rodríguez Ojeda (1923), y la saya blanca de tisú bordada por Victoria Caro (1942). Sobre la cabeza tiene su corona procesional y en el pecherín lleva la medalla de oro de la provincia de Sevilla, un alfiler con su advocación y un pequeño broche. Y en la mano izquierda sujeta un rosario, mientras que ofrece a los devotos la derecha.
En el suelo vemos una alfombra con el escudo de la hermandad y en la parte delantera un centro de nardos, lisianthus y calas blancas, flores que se pueden ver igualmente en los laterales sobre pies de madera dorada y en algunas jarras colocadas en el retablo de la capilla.
Detrás hay dos frontales de altar de plata y sobre ellos dos imágenes de madera con sendos fondos de damasco rojo y crestería de madera dorada. También hay diversas bandejas y jarras con flores de talco. Y al fondo, ante el retablo se sitúan no sólo las jarras ya mencionadas, sino también varios candeleros con cera blanca. Además, en los laterales se han situado unos ángeles con filacterias azules en las que se puede leer "Alabado sea tu nombre".
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