La Virgen de la Hiniesta Gloriosa se traslada mañana, miércoles, a la plaza de San Francisco en la víspera del Corpus. Allí volverá a presidir la procesión eucarística de la Catedral en la mañana del jueves, en una bellísima jornada de Corpus Christi que será felizmente recuperada tras dos años de pandemia.
Hoy, en la víspera de la víspera, ya ha podido verse a la Hiniesta sobre su paso, a falta del exorno floral, en el presbiterio bajo de la Parroquia de San Julián y ante la Hiniesta Dolorosa, que preside provisionalmente el templo. Viste manto rojo de brocado y toca de malla de oro, y luce la corona de oro de Joyería El Regulador (1961), mientras que la corona del Niño, de Manuel Seco Velasco (1974) es de plata sobredorada y ha sido restaurada por iniciativa del grupo joven de la hermandad. Este año, además, el paso lleva en los costeros los faroles de entrevarales del paso de palio de la Virgen del Carmen, de la Hermandad del Carmen Doloroso.
La salida mañana desde la Parroquia de San Julián comenzará a las siete y media de la tarde, y en esta ocasión el itinerario será el siguiente: San Julián, Duque Cornejo, Bordador Rodríguez Ojeda, Padre Manjón, San Luis, San Marcos, Bustos Tavera, Doña María Coronel, Dueñas, Santa Ángela de la Cruz, Alcázares, Encarnación, Laraña, Cuna, Cerrajería, Sierpes y plaza de San Francisco.
La subida al altar situado ante la fachada del Ayuntamiento tendrá lugar a las doce de la noche, coincidiendo con el repicar de las campanas de la Giralda y con la interpretación de la marcha cantada "Salve, Hiniesta", de Manuel Marvizón; un momento siempre muy emocionante con el que la víspera da paso a la triunfal jornada del Corpus Christi en Sevilla.
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