La Hermandad de la Bofetá celebró la mañana del pasado domingo un Rosario de la Aurora con la imagen de María Santísima del Dulce Nombre. Este culto externo permitió la contemplación del bellísimo rostro de la dolorosa iluminado por el sol y recortado en el intensísimo azul de un cielo completamente despejado, tras las incertidumbres meteorológicas de la noche anterior.
La salida desde San Lorenzo se produjo a las nueve menos cuarto de la mañana en dirección al Convento de la Asunción de las Madres Mercedarias, donde se celebró una misa. Posteriormente, se procedió al traslado de regreso de la Virgen del Dulce Nombre, que vestía manto azul y saya rosa, y llevaba además la corona de salida.
A eso de las doce menos cuarto de la mañana regresó a la parroquia. Una
vez dentro, la Virgen se detuvo frente a la Capilla Sacramental del
templo para, acto seguido, acceder a su capilla, donde quedó situada
entre las imágenes de Jesús ante Anás y San Juan Evangelista, a la
espera de su colocación de nuevo en el antiguo camarín del Señor de
Sevilla.
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