La Virgen del Amparo realizó el pasado domingo su esperadísima salida procesional. Ésta es una de las hermandades de gloria con sabor más clásico y capaz de formar auténticas bullas alrededor del maravilloso paso de la imagen atribuida a Roque Balduque.
Llamó la atención este año que las puertas de la Parroquia de la Magdalena estuvieran cerradas hasta el mismo momento de la salida. Hasta ahora siempre han estado abiertas desde bastante antes, lo que permitía ver salir la cofradía tanto desde fuera como desde dentro del templo.
Así pues, las puertas se abrieron algunos minutos después de las seis menos cuarto de la tarde y el cortejo comenzó a salir. Formaban parte del mismo las representaciones de las hermandades del Calvario, Quinta Angustia, Sacramental de la Magdalena y Montserrat; ésta última tras el saludo de la Virgen del Amparo ante la puerta de su capilla.
El paso no se hizo esperar demasiado. Mucha gente llenaba la calle Cristo del Calvario y sobre todo su esquina con San Pablo. Ismael Vargas guiaba el paso, mandando echar los cuerpos a tierra levemente para salvar el dintel de la puerta. Una vez fuera, la Banda de Música María Santísima de la Victoria, de Las Cigarreras, interpretó el Himno Nacional y seguidamente la marcha “Amparo”, con la que el paso fue revirando.
Con “Virgen de Montserrat”, la Virgen del Amparo se volvió ante la representación de la cofradía del Viernes Santo que después se incorporaría al cortejo. Posteriormente, el paso continuó hacia San Pablo. Las numerosas personas que acompañaban al paso tuvieron que comprimirse para que pudiera avanzar. La revirá en esta calle en dirección a la Puerta de Triana se realizó a los sones de “Amor y Socorro”. Como siempre, el repertorio escogido para esta procesión fue muy cuidado.
Una vez situado el paso bajo las cuatro palmeras que simbolizan la antigua puerta de la muralla, la Virgen del Amparo se detuvo antes de girar para meterse en la calle Gravina. Aquí la Banda de las Cigarreras interpretó “María Santísima del Subterráneo” ante el pregonero de la Semana Santa de 2012, Ignacio Pérez Franco. En la salida también pudo verse al pregonero de 2013, Francisco Javier Segura, que habló durante algunos instantes con el presidente del Consejo, Carlos Bourrelier, y al periodista Antonio Burgos.
Con la Virgen del Amparo ya en el primer tramo de Gravina, comenzó a sonar, como ya es tradicional, “La Madrugá”, con la que el paso casi alcanzó el cruce con Canalejas.
A partir de ahí, con marchas como “Aquella Virgen” o “Virgen de los Reyes”, la cofradía continuó buscando la zona del Museo, con la correspondiente visita a la hermandad del Lunes Santo, para regresar a la Magdalena por Rafael Calvo, San Roque, San Eloy, Bailén, San Pablo y de nuevo Cristo del Calvario.
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