SAN JOSÉ DE LA MONTAÑA RECORRIÓ EL CORAZÓN DE SEVILLA

El pasado sábado las principales calles del corazón de Sevilla, en las inmediaciones de la Catedral, vivieron la salida que cada año organiza la Congregación de Madres de Desamparados y San José de la Montaña con la imagen de su titular, desde la casa hogar con que cuentan en la calle Guzmán el Bueno.
El cortejo lo conforman niños del colegio de dicha congregación, que llevan coloridos estandartes que representan diferentes momentos de la vida de Jesús.
La salida tuvo lugar algunos minutos después de las siete de la tarde. El paso, muy sencillo y con los antiguos respiraderos del misterio de San Gonzalo, estaba adornado con una gran variedad de flores de diferentes colores. Nada más salir, un par de hermanas arrojaron pétalos desde el balcón al tiempo que la Agrupación Musical Isla de León, de San Fernando, interpretaba el Himno, seguido de la marcha "La Saeta". Una vez en la calle, hubo que colocar la corona y la aureola con que es normalmente representada esta advocación de San José procedente de Cataluña.

Desde Guzmán el Bueno, San José de la Montaña salió a Mateos Gago y desde allí buscó la Plaza Virgen de los Reyes, donde ni siquiera las hermanas pudieron resistirse a realizar fotos al paso, completamente iluminado por el sol desde detrás de la Giralda. Siguió por Placentines, Alemanes y cruzó la Avenida de la Constitución hacia el Arenal antes de emprender el regreso.
A punto de salir de Mateos Gago, parte de las flores de la esquina delantera derecha se cayeron en una levantá, siendo rápidamente recogidas por uno de los auxiliares de la procesión. Posteriormente, llamó la atención en Placentines cómo los caballos de los coches de turistas aguantaron estoicamente y casi sin alterarse que la agrupación musical fuera a golpe de tambor al pasar junto a ellos antes de tocar "Nuestro Padre Jesús de la Victoria", marcha que recordó a Domingo de Ramos en un primer sábado de mayo de sol y calor.