El pasado sábado, un mes después de la fecha habitual, tuvo lugar la salida procesional de la Virgen de Araceli desde la Parroquia de San Andrés; una salida en la que no sólo fue novedosa la fecha, sino también el acompañamiento musical, que en esta ocasión corrió a cargo de la Banda del Maestro Tejera. La formación musical tuvo además el detalle de ceder a la Virgen para esta salida la Medalla de la Ciudad que el Ayuntamiento de Sevilla le concedió en 2014.
A las ocho y media de la tarde se produjo la salida de la cofradía, que estrenaba en el cortejo las varas de la presidencia y la pértiga, del orfebre Gustavo Larios. En cuanto a la imagen de la Virgen, contaba con unas sandalias de plata para el Niño, obra de Belén Orfebre, y con una media luna del siglo XVIII.
En su itinerario, la Virgen de Araceli, aunque llevaba como otros años los escudos de las hermandades de la feligresía, no pasó por todas ellas, sino únicamente por los Panaderos y la Lanzada, además de estar acompañada en el momento de la salida por la de Santa Marta.
La estación en la Iglesia de San Martín de Tours, sede de la Lanzada, fue la última, ya en el tramo final de la salida procesional. Así, procedente de Alberto Lista, la Virgen de Araceli tomó la calle Saavedras a los sones de la marcha "Pasa la Virgen de la Soledad", seguida luego sin detenerse por "El Corpus" hasta la puerta de San Martín, donde el paso se paró y la marcha se interrumpió.
A continuación, a los sones de "Bajo tu Amparo", el paso encaró la puerta del templo y entró en él con el Himno de España. Ya dentro, se dirigió a la capilla sacramental para detenerse ante el Sagrario y ante las imágenes del Cristo de la Lanzada, la Virgen de Guía y San Juan Evangelista. Entonces, los presentes, entre los que se encontraban algunos miembros de la recientemente elegida nueva junta de gobierno de la Lanzada, ofrecieron a la Virgen de Araceli algunos rezos.
Para la salida de la Virgen de Araceli desde San Martín, la Banda de Tejera interpretó la marcha "Sagrada Lanzada" y, al finalizar la partitura, el paso siguió a tambor durante algunos metros más hasta pararse en el inicio de la calle Cervantes, donde se produjo un relevo de costaleros.
Seguidamente, el paso empezó a recorrer esta calle mientras sonaba la marcha "Santa María de la Paz". Luego, tras la siguiente parada, y en presencia de un hermano cuya pareja ha fallecido recientemente, se hizo una levantá a pulso por los que están en el cielo, en palabras del capataz, Enrique Calle Ramírez.
La marcha que interpretó después la Banda de Tejera, y que sirvió para que la Virgen de Araceli llegara hasta la plaza de San Andrés, fue "Margot". La chicotá concluyó antes de girar hacia la propia plaza, y la siguiente levantá se dedicó al pregonero de la Semana Santa, José Joaquín León, que había acompañado a la cofradía en esta salida.
Instantes después, el paso giró buscando el centro de la plaza a los sones de "Dolores. Saeta onubense". Y luego, mientras giraba ante la puerta, hubo tiempo para una marcha más, que fue "Macarena", de Emilio Cebrián, tras una última levantá en la calle dedicada al director de la Banda de Tejera, José Manuel Tristán.
Finalmente, cuando faltaban once minutos para las doce de la noche, la Virgen de Araceli entraba en San Andrés y la Banda de Tejera completaba su intervención en esta salida procesional con el Himno de España.
Ya dentro, el paso fue conducido hasta los pies de la nave de la Epístola, quedando definitivamente detenido ante el retablo de la hermandad.
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