viernes, 17 de febrero de 2017
EL SEÑOR DE LA ORACIÓN EN EL HUERTO, CON TÚNICA BLANCA EN SU BESAPIÉ
Este viernes ha comenzado en la Capilla de Monte-Sión el besapié a Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto después del quinario celebrado la semana pasada. Tras el altar de besapié tan llamativo del año pasado, con los apóstoles, un monte de flores silvestres y hasta un olivo (ver), en esta ocasión el Señor se presenta a los devotos en el centro de la capilla, sobre la peana de besapié tallada, policromada y dorada con cuatro cirios blancos, y sobre otra peana de plata, colocada sobre la primera. Viste túnica blanca lisa con mantolín al hombro del mismo color y luce las potencias de salida.
Flanquean al Señor dos candelabros plateados situados sobre sendos pies también con decoración pintada, tan habitual de unos años a esta parte en los enseres que adornan los cultos de la Hermandad de Monte-Sión. Además, delante de todo el conjunto hay cuatro blandones dorados, con una jarra del paso de palio de la Virgen del Rosario entre cada pareja portando claveles granates, lirios morados y estátice, flores que también se encuentran en el altar del Cristo de la Salud y en la peana del besapié.
Al fondo, con el retablo de la capilla oculto tras un gran cortinaje de damasco rojo, se dispone el dosel de cultos presidido por la Virgen de Rosario, vestida con manto verde de camarín y saya burdeos, ambos bordados en oro, así como una diadema. Junto a la dolorosa vemos cinco candeleros dorados con cera blanca a cada lado, dos jarras de su palio con flores de tonalidades claras y varias bandejas. Finalmente, en los extremos hay dos pequeños doseles con custodias, flores de talco y otros enseres, mientras que el estandarte de la hermandad se sitúa en el lado derecho.
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