Durante la jornada de ayer, viernes, Nuestro Padre Jesús Cautivo, de la Hermandad de Torreblanca, estuvo expuesto en besapié en el presbiterio alto de la Parroquia de San Antonio de Padua. La imagen se encontraba elevada sobre una de las peanas habituales de los titulares de la hermandad y vestía una túnica morada lisa.
El Cautivo, que tenía unas potencias doradas y un alfiler con su advocación prendido de la parte alta del cíngulo, estaba flanqueado en este sencillo altar de besapié por dos candeleros pertenecientes al juego que poco a poco va a ir siendo sustituido en el paso de palio de la Virgen de los Dolores.
Cada uno de estos candeleros contenía un cirio blanco de gas y ante ellos había sendos centros de claveles rojos, flores también ubicadas en la peana, bajo el Señor.
Por su parte, la Virgen de los Dolores se encontraba ya presidiendo su paso de palio a los pies de la única nave del templo, junto al paso de misterio, donde sólo faltaba la presencia del Señor Cautivo ante Pilatos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario