El próximo lunes, primero de la Cuaresma, tendrá lugar en la Catedral el Vía Crucis de las Cofradías, que en esta ocasión será presidido por el Santísimo Cristo de las Almas, de la Hermandad de los Javieres. En la Parroquia de Omnium Sanctorum ya puede verse al crucificado situado en las andas en las que será trasladado para este culto conjunto de las hermandades; unas andas que además sirven de altar del quinario que esta tarde ha comenzado en el templo de la calle Feria.
Las andas sobre las que irá a la Catedral son las mismas que sirvieron para el Vía Crucis de las Cofradías presidido en 2019 por el Cristo de la Conversión, de la Hermandad de Montserrat (ver), que fue el primer crucificado que presidió este culto en posición vertical, como también lo hará el lunes el Cristo de las Almas. Sin embargo, la crestería no es la misma que llevó el Cristo de Montserrat, sino la de las andas del Señor de la Salud de la Candelaria.
Por otra parte, el Cristo está estrenando un nuevo titulus crucis o INRI, realizado por el imaginero José María Leal, que trata de reproducir con la mayor fidelidad posible el original que se le puso a la cruz de Jesús. En este sentido, hay que indicar que se basa en la reliquia conservada en la Basílica de la Santa Cruz de Jerusalén, de Roma.
Para el quinario, sobre las andas se han colocado varios candeleros con cera color tiniebla y dos jarras del paso de palio de la Virgen de Gracia y Amparo con diversas flores de tonalidad morada, que también vemos en el friso de las andas.
Por su parte, la dolorosa, vestida ya de hebrea, se encuentra en la capilla de la hermandad, en el lugar que ocupa habitualmente el crucificado y acompañada de San Juan Evangelista.
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