La Hermandad de Nuestra Señora de Valvanera, devoción riojana que ancló en el barrio de la Calzada, del que es su Patrona, celebró el pasado sábado su salida procesional desde la Parroquia de San Benito. Fue una salida que presentó algunas novedades, como el nuevo traje para el Niño Jesús, bordado en oro a realce sobre terciopelo burdeos por Elena Trigo Rodríguez, pieza que hizo juego con el manto que en esta ocasión lució en las calles la Virgen de Valvanera, del mismo color y bordados.
Asimismo, se estrenó en la calle la marcha "Aniversario Valvanero", de Pablo Ojeda, dedicada al 50 aniversario de la proclamación de la Virgen de Valvanera como Patrona de La Rioja; así como la presencia de cirios rotulados con el nombre de la hermandad para niños menores de diez años, que pudieron llevárselos a su casa posteriormente como recuerdo.
A las siete de la tarde tuvo lugar la salida de la cofradía de gloria que dirige Carlos Morán como hermano mayor, reelegido este mismo año, quien es a su vez el capataz del paso.
Tras visitar, como cada año, la residencia de ancianos de las Hermanitas de los Pobres, situada en la misma calle Luis Montoto, la Virgen de Valvanera recorrió algunas de las calles del barrio con un cortejo formado por cruz alzada y ciriales, guión del grupo joven de la Hermandad de San Benito, guión del propio santo titular de la parroquia, guión concepcionista, estandarte corporativo de la cofradía de penitencia y estandarte propio de la Hermandad de Valvanera.
Ya había entrado en su templo la Virgen de los Reyes de la Hermandad de los Sastres y estaba cerca de hacerlo la de las Mercedes, cuando el paso de la Virgen de Valvanera, adornado con claveles blancos, combinados con nardos en las esquinas y gladiolos en los costeros, recorría las últimas calles de su itinerario, girando de Campo de los Mártires a Jesús Presentado al Pueblo con la marcha "Pasan los campanilleros", a cargo de la Banda de Música de las Nieves de Olivares.
Posteriormente, tras una chicotá a tambor con un paso, pese a ello, bastante lento, sonó "Rocío" desde Jesús Presentado al Pueblo hasta la calle San Benito, pasando además por la breve calle Lictores. Con el paso detenido en el inicio de San Benito, Carlos Morán quiso dedicar la levantá a Pepe León, del que dijo que "hizo muchas cosas por esta hermandad y ahora nos está viendo desde el cielo". Su hijo, costalero de Valvanera, estaba en ese momento bajo el paso.
Ya en la recta final de la procesión, la Virgen de Valvanera avanzó por la calle San Benito con la marcha "Madrugá Macarena", tras la que el paso se detuvo. La siguiente levantá la dedicó ahora el capataz a la camarera de la Virgen, madre del costalero antes mencionado. Antes de tocar el martillo, Carlos Morán exclamó: "Arriba la Madre del Hijo de Dios", recibiendo como respuesta un "¡olé!" desde debajo del paso. Y es que "Arriba el Hijo de Dios" es lo que este mismo capataz dice cada Martes Santo delante del paso de la Presentación al Pueblo de San Benito.
A continuación, la Banda de las Nieves de Olivares interpretó "Mi Amargura", seguida después por "Como tú ninguna", marcha interrumpida en su parte final cuando la Virgen de Valvanera llegó a la puerta de la parroquia.
Bajo una enorme luna, la escena del ladrón Nuño Óñez y el clérigo Domingo contemplando a la Virgen de Valvanera comenzaba a despedirse de las calles de la Calzada para entrar en la parroquia. Con la marcha "Procesión de Semana Santa en Sevilla", el paso fue girando frente a la puerta para entrar dando la cara a los vecinos y devotos.
Previamente, el capataz había dedicado la levantá a las madres de los componentes de la cuadrilla. "Por vuestras madres, que os parieron costaleros sevillanos", dijo.
Después, con el paso detenido ante la puerta, se puso en marcha el mecanismo de bajada de la Virgen y del roble situado tras ella para salvar el dintel, y la Virgen de Valvanera entró en San Benito a los sones del Himno de España.
Una vez que el paso estuvo dentro, no se cerraron las puertas, dado que este año la banda ha acompañado con sus sones el giro de ciento ochenta grados que hace después el paso para situarse mirando hacia el altar, posición en la que se queda sin llegar a bajar las escaleras que separan el nivel de la calle del de las propias naves del templo.
"Pasa la Virgen Macarena" fue la marcha escogida para este momento tras el que, ahora sí, se cerraron definitivamente las puertas de la Parroquia de San Benito, poniendo el punto final a la procesión anual de la Patrona de la Calzada.
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