La imagen de María Santísima de los Dolores, de la Hermandad de las Penas de San Vicente, permanece hoy, Viernes de Dolores, en el altar mayor de la parroquia con motivo de su solemne veneración y para la posterior función religiosa que tendrá lugar a las ocho y media de la tarde.
La dolorosa está elevada sobre una doble peana de madera dorada y viste manto y saya de terciopelo negro bordados en oro, así como una toca de sobremanto de encaje dorado. Luce su corona de salida y en el pecherín tiene un puñal, mientras que en la mano derecha sujeta un pañuelo.
Flanqueando a la Virgen de los Dolores vemos dos tríos de blandones dorados con cera blanca, y delante dos columnas de madera dorada sobre las que se elevan unas jarras con claveles blancos. Al fondo, ante el dosel de cultos de la hermandad está la cruz arbórea que para su culto diario suele llevar sobre su hombro izquierdo el Señor de las Penas.
Y en los laterales, encima del frontal de altar tan característico de esta hermandad, hay otras dos jarras y cuatro jarritas también con claveles blancos, además de seis candeleros con cirios del mismo color, tres a cada lado.
Finalmente, entre el frontal de altar y la sillería del coro se han dispuesto doce candeleros dorados con cirios blancos, seis a cada lado, y dos de los faroles del paso de palio de la Virgen de los Dolores sobre sendos pies de madera en su color de base cuadrada.
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