La Virgen de la Cabeza vivió este sábado su salida procesional por la feligresía de San Juan de la Palma; una salida con algunas novedades causadas por factores externos. Para empezar, tanto el horario como el itinerario tuvieron que ser modificados a última hora debido a las obras que el Ayuntamiento está llevando a cabo en la plaza de Monte-Sión, y al hecho de que el mismo día, como es costumbre, estaba también en la calle, muy cerca, la Divina Enfermera de San Martín. Así las cosas, además de tener que renunciar a su discurrir habitual por la plaza de los Maldonados y las calles Laurel y Espíritu Santo, la cofradía filial de la de Andújar retrasó en media hora, hasta las siete, su salida.
La otra novedad fue el acompañamiento musical, que sólo por este año ha corrido a cargo de la Banda de Música del Maestro Tejera. La banda habitual, la de la Cruz Roja, estaba este sábado en Alcaudete, precisamente una localidad jiennense como lo es la cuna de la devoción a la Virgen de la Cabeza. La Banda de la Cruz Roja tocaba en la procesión de la Virgen de la Fuensanta con motivo de su Coronación Canónica.
Con todas estas novedades, la Virgen de la Cabeza salió de San Juan de la Palma pasadas las siete de la tarde y la Banda de Tejera tocó para ella "Morenita y pequeñita", una composición, junto a otras, que le otorgan a esta cofradía de gloria una gran personalidad y una idiosincrasia propia.
Los primeros metros recorridos por la Virgen de la Cabeza, cuyo paso guiaba Manuel Roldán Rojas, la llevaron a la residencia de ancianos situada frente al templo. Sus residentes salieron a la puerta, algunos de ellos con sillas, para ver a la Virgen morena, que llegó hasta ellos a los sones de "La Estrella Sublime", marcha que fue interpretada en dos ocasiones, por lo que también se alejó con ella de la residencia.
La Virgen de la Cabeza vestía para su salida procesional el conjunto estrenado en 2016, cuando presidió en la Catedral el Pregón de las Glorias: el manto azul y la saya blanca, bordados en oro en el Taller de Santa Clara. Además, llevaba la toca de sobremanto de malla y el fajín rojo, junto a un buen número de broches.
Por otro lado, los codales que en la delantera escoltaban la réplica de la rosa de oro concedida por Benedicto XVI a la Virgen de la Cabeza, la de Andújar, tenían pintados el escudo de la Hermandad del Pilar y el logotipo de la bajada de dicha imagen desde su santuario a la localidad jiennense que tendrá lugar el próximo 22 de octubre.
Con la marcha "Hiniesta Coronada", el paso, adornado con rosas, nardos, anthurium y lisiantum, entre otras especies florales, empezó a recorrer la calle Feria.
La Banda de Tejera interpretó "Procesión de Semana Santa en Sevilla" mientras la Virgen de la Cabeza se acercaba a la Capilla del Rosario de Monte-Sión. Los cofrades del Jueves Santo la esperaban en la puerta con su estandarte corporativo y el paso se volvió hacia ellos y se detuvo. Quedó así encajado entre la capilla y las vallas ubicadas detrás que delimitaban la zona de las obras que impidieron a la hermandad seguir su itinerario acostumbrado.
La levantá ante la capilla la hicieron los costaleros a pulso y estuvo dedicada a todos los hermanos de Monte-Sión. A continuación, el paso comenzó a alejarse con la marcha "El Corpus" buscando Conde de Torrejón. Y es que fue justo a partir de este punto donde la cofradía modificó el itinerario normal.
Merece la pena mencionar que el capataz pidió despejar pronto la calle Feria, ya que vio detrás un vehículo de los bomberos que estaba en la zona porque varios miembros de este cuerpo estaban realizando en ese momento una actuación en la azotea de uno de los edificios cercanos.
Más adelante, tras una chicotá a tambor, la Virgen de la Cabeza giró a la calle Alberto Lista a los sones de "María Santísima del Subterráneo". Y luego, aún en esta calle, el capataz dedicó una levantá a una mujer de nombre María Dolores que se encontraba en ese momento delante del paso. "Es hermana de San Benito, pero se enamoró de la Morenita en San Juan de la Palma", dijo el capataz, quien pidió a la Virgen "que le dé mucha salud y la cuide siempre".
Desde Alberto Lista, cuando ya anochecía, la Virgen de la Cabeza salió a la calle Viriato y llegó hasta el inicio de Viejos con la marcha "Rocío". Por estas mismas calles había pasado poco antes la Divina Enfermera en esta tarde de Glorias que parecen seguirse y cruzarse en sus respectivos recorridos.
Más adelante, el paso tomó la calle Amparo y con "Pasa la Virgen Macarena" salió a la plaza del Pozo Santo, volviéndose luego ante la puerta de la Comunidad de Terciarias Franciscanas con una nueva interpretación de "Morenita y pequeñita".
Las religiosas del Pozo Santo le cantaron una composición a la Virgen de la Cabeza, que más tarde se marchó por la calle Jerónimo Hernández a los sones de "Virgen de las Aguas".
La cofradía continuó su camino por Santa Ángela de la Cruz, con parada ante el convento, saliendo después a San Pedro para tomar las calles Doña María Coronel y Dueñas. La Virgen de la Cabeza se presentó igualmente ante el Convento del Espíritu Santo antes de regresar a San Juan de la Palma, concluyendo así una salida procesional diferente y, precisamente por ello, muy especial.
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