El Santo Cristo del Mayor Dolor, de la Hermandad de la Bofetá, debería haber salido a las calles de la feligresía de San Lorenzo en la tarde de ayer para el rezo del vía crucis. Sin embargo, la lluvia impidió esta salida y finalmente el vía crucis se hizo en el interior del templo.
Antes, durante la mañana, el crucificado estuvo expuesto en besapié en la capilla de la hermandad, donde ya estaba situado sobre las andas en las que estaba previsto que saliera horas después. Los devotos pudieron así besar sus pies estando el Cristo en posición horizontal ante la Virgen del Dulce Nombre y entre las imágenes de Nuestro Padre Jesús ante Anás y San Juan Evangelista.
Las andas, iluminadas con dos guardabrisones laterales, estaban adornadas con lirios morados en la base y en los brazos de la cruz. Son las mismas flores que veíamos en cuatro jarras y dos centros situados en los altares de las tres imágenes procesionales de la cofradía.
Además, cuatro blandones de madera dorada rodeaban al Cristo del Mayor Dolor, en tanto que los demás titulares estaban flanqueados por candeleros, todo ello con cera blanca. Hay que mencionar además que la Virgen del Dulce Nombre se sitúa estos días ante un ancho dosel de damasco rojo que cubre su retablo y que tiene en el centro de la gotera el escudo de la hermandad.
La dolorosa está vestida como en sus primeras fotos recién salida del taller de Castillo Lastrucci, con diadema y un tocado colocado por encima del manto. En cuanto a Jesús ante Anás, tiene puesta la túnica del centenario de su hechura, obra bordada en oro sobre terciopelo azul por José Antonio Grande de León el año pasado.
El besapié al Santo Cristo del Mayor Dolor continuará en horario de mañana y de tarde durante todo el fin de semana, hasta finalizar en la noche de mañana, domingo.
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