La Hermandad del Valle celebra este fin de semana el besapié al Santísimo Cristo de la Coronación de Espinas, que se encuentra para ello sobre el gran entarimado ubicado en el presbiterio de la Iglesia de la Anunciación, elevado en la peana de cultos diseñada por Antonio Díaz Arnido y estrenada en 2020.
El Cristo que tallara Agustín de Perea luce sus potencias de salida y lleva además la clámide conocida como la de los bodoques. A sus pies, sobre la peana, hay varias especies florales de color rojo entre las que destacan unas rosas de gran tamaño, flores que también vemos en varias jarras repartidas por distintos puntos del montaje del besapié y en tres centros en el suelo del presbiterio.
Cuatro de esas jarras se encuentran colocadas, en forma cónica y bicónica, sobre sendos pies de base cuadrada forrados en terciopelo morado con el emblema de la hermandad en la parte frontal. Sobre pies similares están también los cuatro faroles de plata del paso de misterio de la Coronación de Espinas.
Detrás, vemos el dosel de cultos de la hermandad que cobija la reliquia de la Santa Espina encima de una alta columna de madera dorada y policromada. Y en los laterales hay dos pequeños doseles con diversos enseres litúrgicos.
Finalmente, hay que mencionar que sobre un frontal de plata se ha situado una gran cantidad de candeleros con cera verde, el mismo color de los cirios que hay en varios blandones de madera dorada que rodean el entarimado sobre el que se ha dispuesto todo el montaje este besapié.
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