La Hermandad de la Vera-Cruz celebra hoy, como cada Viernes de Dolores, el solemne besapié a su crucificado titular, que se encuentra ante un cortinaje de terciopelo verde ubicado a los pies de la nave central de la Capilla del Dulce Nombre de Jesús.
El Cristo de la Vera-Cruz, que lleva unas potencias de plata, está en posición vertical, con una peana de madera dorada a sus pies en la que hay un pequeño monte de claveles. Junto a él hay dos parejas de blandones dorados con cirios verdes; y entre cada pareja una columna de madera dorada con fuste salomónico y capitel corintio que sujeta un antigua jarra del paso de palio de la Virgen de las Tristezas también con claveles. Y en los laterales de todo este conjunto se sitúan los ángeles ceriferarios que acompañan cada Lunes Santo en su paso al crucificado.
Delante encontramos otras dos parejas de blandones, también con jarras entre ellas, así como unos faroles metálicos de mano. Tanto estas jarras como los ángeles mancebos se elevan sobre pies de base cuadrada forrados en terciopelo verde. Finalmente, en el lado derecho está el estandarte corporativo.
Esta tarde, tras la misa de las ocho, se celebrará el vía crucis con el Cristo, que será llevado hasta el Convento de Santa Rosalía; y a su regreso será subido a su paso procesional.
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