domingo, 31 de diciembre de 2017

MEMORIA COFRADIERA DE 2017

A partir de mañana, las entradas que se publiquen en este blog se situarán en una pestaña hoy inexistente, la de 2018, que será el décimo año de vida de 'Periodista Cofrade', un proyecto personal surgido en su momento como un modo de expresión de mi doble condición de, como el propio nombre del blog indica, periodista y cofrade.
En todo este tiempo, este blog me ha dado más satisfacciones de las que imaginé en su momento, cuando lo puse en marcha sin demasiadas pretensiones. Y hoy, cuando despedimos el año 2017, 'Periodista Cofrade' ha vuelto a superar el número de entradas publicadas en cualquiera de los años anteriores. Así, de las 386 entradas de 2016, la cifra más alta hasta entonces, en estos últimos doce meses se han alcanzado las 424.
No se trata de establecer un récord por establecerlo. A nadie he de impresionar con esto. Es más; cualquier cofrade y seguidor de este blog habrá detectado que faltan en el listado de entradas de este año algunas salidas procesionales, besamanos, besapiés, vía crucis, exposiciones, carteles y hasta alguna salida extraordinaria. Al final, este blog es sólo una afición. Una afición relacionada con lo que más me apasiona en este mundo. Pero uno tiene una vida y no siempre se puede estar en todo. Incluso diría que es sano dedicarse a otras cosas. Pido en cualquier caso disculpas a los cofrades que noten que este año no he prestado a sus hermandades toda la atención que hubieran esperado. No hay detrás de ninguna ausencia ni vetos deliberados ni motivaciones o gustos personales.
Lo importante es que cada una de las 424 entradas de 2017 han sido 424 emociones y sentimientos que por alguna razón decidí compartir con quien intencionada o accidentalmente haya caído a lo largo del último año en este blog. En todas ellas, quien ha hablado ha sido el periodista y el cofrade, siempre desde una perspectiva personal; por supuesto sin inventar nada, pero igualmente, sobre todo al emitir opiniones propias, sin tratar ni de molestar a nadie ni de regalar lisonjas para caer mejor o elevar el número de visitas.
A continuación, como se ha convertido en tradicional al llegar cada 31 de diciembre, repasamos mes por mes lo que ha dado de sí 2017 en el terreno cofradiero sevillano.

ENERO
El primer mes del año nos trajo una noticia esperada relativa a la Hermandad de la Resurrección, abandonadas por fin sus pretensiones de pasar al Sábado Santo. En un cabildo general extraordinario se aprobaba retrasar la hora de salida de la cofradía de la madrugada a la mañana del Domingo de Resurrección, su jornada natural, lo que, como veríamos después, se tradujo en un gran éxito, con una hermandad acompañada durante todo su recorrido y una carrera oficial sin desmontar (ver).
Ese mismo fin de semana, en la Iglesia del Salvador asistíamos al besapié al Señor de Pasión, que se presentó a los devotos vestido con la túnica bordada más antigua de su ajuar, confeccionada por Manuel María Ariza en 1845; la misma con la que después haría estación de penitencia el Jueves Santo (ver).
Otra imagen interesante del mes de enero fue la del altar de cultos del Santísimo Cristo de Burgos, que contó con la presencia de Madre de Dios de la Palma vestida de hebrea a sus pies (ver).


El mes de enero también nos dejó la presentación del cartel de la Semana Santa de 2017 editado por el Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla; una obra del pintor José María Jiménez Pérez-Cerezal con el Cachorro como protagonista (ver).


Otro cartel, el de las Fiestas de Primavera del Ayuntamiento, fue presentado días más tarde. Se trataba de una obra de Nuria Barrera que concitó numerosos comentarios elogiosos debido a la originalidad del concepto escogido por la artista: las fiestas principales de la ciudad colocadas en el interior de un armario de cualquier casa sevillana (ver).
Y entre los últimos días de enero y los primeros de febrero, el Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla acogió la primera de las exposiciones del ciclo de 2017 de su "Círculo de Pasión", que tuvo a la Hermandad de los Servitas como protagonista. Fue una muestra enmarcada en la celebración del L aniversario de la Virgen de la Soledad, por lo que también sirvió de homenaje a su autor, Antonio J. Dubé de Luque, a cuya obra se dedicó una de las salas (ver).



FEBRERO
En una fecha no muy acostumbrada, tuvo lugar la salida extraordinaria de una hermandad de gloria, lo que tampoco es habitual. La Candelaria Madre de Dios celebró el 11 de febrero, nueve días después de su festividad, una procesión extraordinaria con motivo del L aniversario de la hermandad y de la propia imagen titular. Desgraciadamente, la lluvia fue protagonista y obligó no sólo a retrasar la salida, sino a recortar en gran medida el itinerario previsto (ver).


Entre el 11 y el 18 de febrero pudimos ver la segunda exposición anual del "Círculo de Pasión", esta vez dedicada a la Hermandad de los Gitanos, y que sirvió para presentar la nueva túnica bordada para el Señor de la Salud por el taller de Sucesores de Caro, reproduciendo el diseño de la antigua túnica procesional de Rodríguez Ojeda, desaparecida en el incendio de San Román en 1936 (ver).


Entre los besapiés que ya en febrero comenzaron a celebrarse, llamaron la atención los del Cristo de la Exaltación, que estuvo acompañado por la Virgen de las Lágrimas y San Juan Evangelista (ver), y Nuestro Padre Jesús Despojado, que tenía a su lado en el altar de este culto a dos de los sayones de su paso de misterio (ver).
Por otro lado, la Hermandad de las Aguas inició el día 17 los actos conmemorativos del L aniversario de la imagen de la Virgen de Guadalupe. Ese día fue trasladada la dolorosa hasta la Parroquia del Sagrario (ver), donde tuvieron lugar un besamanos extraordinario (ver) y la función solemne. En este mismo mes de diciembre se han clausurado estos actos de la misma forma, con la Virgen de nuevo en el Sagrario.



MARZO
El día 6 de marzo, primer lunes de Cuaresma, se celebró el Vía Crucis de las Cofradías, presidido este año por el Señor de la Oración en el Huerto de la Hermandad de Monte-Sión. El propio obispo, Juan José Asenjo, hizo hincapié en que todo había salido bien, "pese a ser lunes", en clara alusión a la manía que muchos expresan pidiendo que este acto sea en fin de semana para que vaya más gente. La obsesión por la masa... ya se sabe (ver).


Y otro vía crucis muy especial fue el que con carácter extraordinario celebró la Hermandad de San Gonzalo con la imagen de Nuestro Padre Jesús en Su Soberano Poder. Fue un vía crucis multitudinario, para alegría de los de la masa, que recorrió las calles del Barrio León y el Tardón con motivo del LXXV aniversario de la hermandad y de la parroquia (ver).


Hablando de vía crucis, desde el de la Hermandad de la Hiniesta en enero, también algunos de los celebrados durante la Cuaresma se vieron afectados por la nueva norma diocesana que impide a las cofradías salir en su recorrido de los límites de sus respectivas feligresías. Ello obligó, por ejemplo, a que la Hermandad del Santo Entierro tuviera que renunciar a su habitual itinerario con el Señor Yacente por la zona del Museo, que pertenece a la Parroquia de San Vicente, y en su lugar tuviera que dirigirse hacia la parroquia correspondiente a la Iglesia de San Gregorio, que es la de San Andrés, donde llegó a entrar para el rezo de una de las estaciones (ver).
Por su parte, el vía crucis de la Hermandad de San Esteban, con la imagen de Nuestro Padre Jesús de la Salud y Buen Viaje, se rezó íntegramente en el interior de la Parroquia de San Bartolomé (ver).
En el apartado expositivo, el Círculo Mercantil recuperó este año la tradición perdida de exponer los estrenos y restauraciones de las hermandades de cara a la Semana Santa (ver), además de ofrecer una muestra monográfica sobre la obra del imaginero Manuel Martín Nieto (ver).
Pero, sin duda, un capítulo aparte merece la exposición "Presencia", que se celebró en la Iglesia del Santo Ángel con motivo del cuarto centenario del Cristo de los Desamparados. Junto al crucificado de Martínez Montañés, se pudo ver al Cristo del Seminario Mayor de Granada, de Pablo de Rojas, maestro de Montañés, y al Cristo de la Agonía de la localidad vasca de Vergara, obra de su discípulo Juan de Mesa que se encuentra en Sevilla debido a la restauración que aún hoy está llevando a cabo el IAPH (ver).


Es de destacar también la recogida de alimentos llevada a cabo el 16 de marzo por la Hermandad del Carmen de San Leandro, que logró reunir más de 2.000 kilos con destino a Haití y Malawi, países con un altísimo nivel de pobreza (ver); así como la primera ocasión en que pudimos ver al Señor de la Salud de los Gitanos con la nueva túnica de Sobrinos de Caro en su altar de quinario (ver).
El último día del mes se vivió otro vía crucis extraordinario, como fue el del Cautivo de San Ildefonso, que salió sobre el paso de San Juan Bosco, de la Archicofradía de María Auxiliadora de la Trinidad. El motivo de este acto presidido por una de las imágenes que concitan mayor devoción fue el CLXXV aniversario de la bendición de la Iglesia de San Ildefonso (ver).



ABRIL
El cuarto mes del año fue el de la Semana Santa. Antes de su llegada, sin embargo, hubo tiempo para interesantes escenas en los últimos cultos cuaresmales de las hermandades, como el estreno de un manto de camarín para la Virgen de la Palma del Buen Fin (ver), el préstamo de un manto de la Esperanza de Triana para la Virgen del Carmen Doloroso (ver), el estreno de un mantolín bordado para el Señor de la Redención (ver) o la celebración del besapié al Santísimo Cristo del Perdón, del Convento del Socorro, en la iglesia del Convento de Santa Isabel (ver).
Ya inmersos en una Semana Santa marcada por el intenso calor y la ausencia total de lluvias, hay que destacar en el Viernes de Dolores (ver) el estreno en la Hermandad de Bellavista de las nuevas tallas de San Juan Evangelista y Judas Iscariote, obra de Juan Manuel Montaño, para el paso de misterio de Nuestro Padre Jesús de la Salud y Remedios.


Por su parte, la Hermandad de Pasión y Muerte estrenó el juego de ángeles para las esquinas tallados por Mariano Sánchez del Pino, mientras que la Hermandad de la Misión recuperó para su Nazareno la túnica morada lisa que no lucía en su estación de penitencia desde 2013.
En el Sábado de Pasión (ver), la Hermandad del Divino Perdón estrenó la primera tanda de la candelería y el acompañamiento musical en el paso de palio de la Virgen de la Purísima Concepción, a cargo de la Banda de la Soledad de Cantillana, mientras que el Señor del Divino Perdón procesionó con potencias, al contrario que en años anteriores.
También la Hermandad de Torreblanca concentró los estrenos en su paso de palio, que en este caso presentó como novedad, dentro de su proyecto de renovación integral, los candelabros de cola y la peana, de Orfebrería Andaluza.


En la Hermandad de la Milagrosa se vivió un pequeño susto cuando el aire movió los ropajes de la talla del guardia judío situado en la trasera del misterio y lo acercó hasta una de las tulipas de los candelabros, provocando un fuego rápidamente apagado con uno de los extintores que lleva la cofradía en previsión de incidentes. El Señor de la Esperanza, por su parte, vistió una túnica color salmón, mientras que la Virgen del Rosario lució una toca de sobremanto de la Virgen del Rocío del Beso de Judas.
Y en Padre Pío, fue novedad tras el palio de la Virgen de la Divina Gracia la Banda de Música de las Angustias de Sanlúcar la Mayor. El amplio capítulo de estrenos de esta jornada se cierra en San José Obrero, cuya hermandad visitó en su recorrido la Basílica de María Auxiliadora.
En un Domingo de Ramos (ver) sin la incertidumbre meteorológica del año anterior, hubo varias novedades, como fue el estreno de una clámide de terciopelo granate para Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia, donada por una familia de cofrades de la Cena.


En esta misma hermandad, la Virgen del Subterráneo sorprendió con una antigua corona que hacía décadas que no llevaba en su estación de penitencia. En cuanto a la Hermandad de Jesús Despojado, el Señor vistió una túnica morada y llevó potencias, pero no corona de espinas.
En la Hermandad de la Paz fue novedad, tras la destitución de Antonio Santiago, la participación de Ernesto Sanguino como nuevo capataz general. La dolorosa realizó por primera vez la estación de penitencia desde su Coronación Canónica.
Y dos últimos apuntes del Domingo de Ramos de 2017, como son el estreno de la restauración de los romanos del misterio de la Amargura y el exorno floral del paso del Señor de las Penas de San Roque, que sustituyó sus habituales claveles rojos por claveles de color púrpura claro salpicados con estátice.
El Lunes Santo de 2017 (ver) supuso el reencuentro con la perfección, después del año anterior, en que la lluvia dejó la jornada reducida prácticamente a la mitad. En cualquier caso, no todo fue alegría en el Polígono de San Pablo, dado que la hermandad recordó a su hermano mayor, Miguel Ángel Campos, fallecido hace ahora un año. Por otro lado, el barrio cumplía 50 años y no lo pudo celebrar la hermandad, que también celebraba la primera década de la Virgen del Rosario, estrenando su nuevo palio de Charo Bernardino. No dio tiempo a acabarlo, por lo que habrá que esperar al próximo Lunes Santo.
Sí hubo estrenos en la Hermandad del Beso de Judas. En el paso de misterio, los apóstoles lucieron las nuevas túnicas bordadas por el taller de Santa Bárbara; todas de terciopelo bordado en oro, salvo la de Judas Iscariote, bordada en plata. Quedó para el debate la conveniencia o no de bordar la túnica del apóstol traidor, que, obviamente, no es un santo de la Iglesia Católica. En cuanto al palio de la Virgen del Rocío, la lluvia nos privó en 2016 de ver en la calle su manto bordado, por lo que, aunque no era propiamente un estreno de este año, en parte se puede considerar así.


En 2016 sí que se pudo disfrutar, aunque muy fugazmente, del palio recién restaurado de la Virgen de las Mercedes de Santa Genoveva. Este año se pudo contemplar durante todo su recorrido, como tuvimos también ocasión de ver a la Virgen de la Salud de San Gonzalo, vestida por primera vez por Antonio Bejarano y a siete meses de su Coronación Canónica.
Asimismo, hay que subrayar que la Virgen de Guadalupe, de la Hermandad de las Aguas, procesionó en su paso de palio vestida de hebrea, que es la forma en que la dolorosa se encontraba vestida hace cincuenta años, en las primeras fotografías que se conservan de la imagen.


El Lunes Santo nos trajo también el estreno de la restauración de las caídas laterales del palio de la Virgen de los Dolores de San Vicente y un exorno floral para el Cristo de la Expiración del Museo formado por una variedad inédita hasta ahora en este paso: rosas, anémonas, calas e hipéricum, todas de color rojo.
Más de treinta grados de temperatura hicieron aún mayor la penitencia de los nazarenos del Cerro a su paso por la avenida de Ramón y Cajal en las primeras horas de la tarde del Martes Santo (ver); una jornada que presentó muy pocas novedades. En el caso de la Hermandad de San Esteban lo novedoso fue el itinerario de ida, que llevó a la cofradía a alcanzar la Plaza de la Alfalfa, para después salir por Sales y Ferré a la Plaza del Cristo de Burgos y por Imagen y Laraña llegar a Orfila. Hasta 2015, pasaba por el Salvador y Cuna; y en 2016 discurrió por San Ildefonso. En el paso de palio de la Virgen de los Desamparados era nuevo el bordado de los respiraderos laterales y la restauración de la saya de Padilla, de 1963, pasada a terciopelo burdeos por Grande de León.


Otros estrenos fueron los faldones del misterio de San Benito, la restauración de los candelabros del misterio de Jesús ante Anás, así como la de las tallas de Caifás y el falso acusador, y la restauración de las tablas pintadas y las figuras de los apóstoles del paso del Cristo de las Misericordias de Santa Cruz.


El Miércoles Santo (ver) presentó su primera novedad bien temprano. Tras el Cristo de la Sed fue por primera vez la Banda de Cornetas y Tambores del Rosario de Cádiz. Todo un acierto. Por su parte, la Hermandad del Carmen estrenó cuatro jarras para el paso de palio de José Manuel Bernet y recuperó para su paso de misterio los antiguos respiraderos de terciopelo y malla, sobre los que iba un nuevo moldurón tallado por José Carlos Ligero y dorado por David de Paz.


No se notó, pero la Virgen del Buen Fin de la Lanzada salió con el antiguo manto de la Virgen de los Desamparados de San Esteban. Un problema en la tintorería derivó en la necesidad de pedir prestado este manto, igualmente liso y de terciopelo burdeos, para la estación de penitencia.
Por contra, sí que fue evidente la fantástica restauración del manto procesional de la Caridad del Baratillo, labor llevada a cabo por el taller de Sucesores de Caro. Hay que recordar que precisamente debido a estas labores de restauración, la Virgen de la Caridad tuvo que procesionar en 2016 con el manto de Borrero de la Esperanza de Triana. Y la otra dolorosa del Baratillo, la Virgen de la Piedad, hizo por primera vez estación de penitencia tras su restauración por parte de Juan Manuel Miñarro.
Por su parte, el paso de palio de la Virgen de la Cabeza de las Siete Palabras estrenó la caída frontal, bordada por Jesús Rosado, mientras que la que estos años iba en dicho lugar pasó a la trasera.


En la Hermandad de los Panaderos fue novedad este año la restauración de la cruz de guía, el libro de reglas y los candelabros del paso de misterio, y la saya de la Virgen de Regla con bordados de Rodríguez Ojeda, pasados a terciopelo azul por Mariano Martín Santonja.
Una última nota sobre el Miércoles Santo es la originalidad del exorno del palio de la Virgen de la Palma de la Hermandad del Buen Fin, donde se vieron flores realizadas con hojas de palma procedentes de Elche.
Llegamos al Jueves Santo (ver), en el que la Hermandad de los Negritos estrenó capataces (Antonio Hierro con el Cristo de la Fundación y los hermanos Gallego con la Virgen de los Ángeles) y la restauración del manto de la dolorosa, llevada a cabo durante nueve meses por el IAPH.


En la Exaltación, sin embargo, el estreno fue musical, con la marcha "Lágrimas de Sevilla", de Francisco Martín y Juan Luis Jiménez, mientras que en Monte-Sión se pudieron ver recién restaurados por Emilio López Olmedo los tres apóstoles que duermen bajo el olivo en Getsemaní. Otra restauración, la de la corona de la Virgen de la Merced, presentó la Hermandad de Pasión, mientras que los soldados de las Cigarreras mostraron unas nuevas cotas de malla de los talleres Armillum.


Por último, hay que comentar la rotura del llamador del paso de Nuestro Padre Jesús con la Cruz al Hombro, de la Hermandad del Valle, lo que obligó a utilizar un jarrillo de lata en su lugar.
Este año de nuevo hay que hablar de graves incidentes en la Madrugá (ver); unos incidentes a los que, como era de esperar, las autoridades no han sabido, podido o querido dar unas explicaciones convincentes. Hubo heridos de diversa consideración y una banda, la de San Juan Evangelista, que tuvo que abandonar su puesto ante la cruz de guía de la Esperanza de Triana por la gravedad de lo vivido por sus componentes y el destrozo de algunos de sus instrumentos. Y todo por una reedición de las "carreritas" o estampidas de auténtico pánico que determinada gentuza provoca para su diversión. Las autoridades hablan de una pelea en la calle Arfe mientras pasaba la Hermandad del Gran Poder como desencadenante de unas carreras de las que unos delincuentes se aprovecharon incrementando el miedo al golpear los contenedores con palos y sillas de los chinos... Pues vale.
Para su estación de penitencia, el Señor del Gran Poder volvió a salir con túnica lisa, mientras que el Señor de las Tres Caídas lució la morada bordada en oro por Carrasquilla; el Señor de la Sentencia llevó la granate de José Caro; y el Señor de la Salud de los Gitanos vistió una túnica de terciopelo morado lisa.
Entre las dolorosas que tienen varios mantos de salida, la del Mayor Dolor y Traspaso sacó el de Rodríguez Ojeda; la Esperanza Macarena vistió el camaronero, del mismo autor; la Esperanza de Triana, el manto de Borrero; y las Angustias de los Gitanos, el azul pavo de Carrasquilla.
Dos principales estrenos patrimoniales hubo en la pasada Madrugá. Por un lado, el palio de la Macarena presentó la restauración de las caídas, labor llevada a cabo por el taller de Sucesores de Caro.


Y por otro lado, el paso de palio de la Virgen de la Presentación, de la Hermandad del Calvario, estrenó el bordado de los faldones, realizado por José Ramón Paleteiro.


En la jornada del Viernes Santo (ver), que supuso una vuelta a la calma, vimos este año al Señor de las Tres Caídas de San Isidoro con su túnica más antigua, bordada en oro sobre terciopelo granate por Francisco de Saavedra en 1718. Su paso, además, estrenaba el llamador, realizado en bronce por Jesús Domínguez. 
Por su parte, la Soledad de San Buenaventura volvió a sorprender con su exquisita forma de ser vestida por Grande de León y por el exorno floral, este año formado por rosas de color malva.


Y de Triana salió la Virgen de la O por primera vez después de su salida extraordinaria de octubre de 2016 con motivo del CDL aniversario fundacional. Este año, sin embargo, lo que la cofradía celebraba era el décimo aniversario de la Coronación Canónica. Su paso de palio, por cierto, estrenó la restauración de los respiraderos por parte del taller de Villarreal. Y en Montserrat, la novedad estaba en la restauración de la imagen de la Magdalena, labor llevada a cabo por Rocío Sáez Millán.


Ya en el Sábado Santo (ver), hay que mencionar que la Hermandad del Sol, que salió quince minutos antes que el año anterior, estrenó en su paso de palio los candelabros superiores de la candelería, de Jesús Domínguez, y la decoración de las caídas interiores mediante elementos de plata del orfebre Juan Angulo. Exactamente, la decoración consta de cartelas con caras de ángeles, estrellas y soles con espejos.


En la Hermandad de la Trinidad, nuevamente los estrenos se concentraron en el paso de misterio del Cristo de las Cinco Llagas, que continúa con su proceso de dorado a cargo de los Hermanos González, quienes para este año doraron los respiraderos frontal y trasero. Además, los Hermanos Caballero, autores del paso, realizaron las cartelas presentes en dichas partes.


También en este paso, hay que señalar que la Virgen de la Concepción volvió a salir con su habitual diadema, después de varios años en que la que ha llevado es una perteneciente a la Virgen de las Angustias, de la Hermandad de los Gitanos. Y otra dolorosa de esta jornada, la Virgen de Villaviciosa, no iba con diadema, sino con un nimbo que hacía tiempo que no llevaba durante la estación de penitencia.


Y el broche de oro llegó el Domingo de Resurrección (ver) con la cofradía de Santa Marina, que comprobó lo que durante años evitó: que retrasar la hora de salida no sólo beneficiaba a la seguridad de la hermandad en la calle, sino también a la cantidad de gente que iba a acompañarla durante todo su recorrido.
Así, la Hermandad de la Resurrección estrenó horario, saliendo de su templo a las ocho y media de la mañana, en lugar de las cinco menos cuarto de la madrugada. La entrada en Campana fue a las once y media, con todas las sillas colocadas y llenas de gente, ocupadas gratuitamente por cofrades y no por abonados (que no siempre es lo mismo); cofrades que recibieron con un sonoro aplauso la llegada de la cruz de guía y de cada uno de los pasos. Fue, sin duda, uno de los grandes momentos de la Semana Santa. 
Después, tras hacer estación de penitencia en la Catedral, con la Virgen de la Aurora saliendo a eso de la una de la tarde por la Puerta de los Palos, quedaba el recorrido de vuelta con la cofradía arropada en todo momento, hasta que a las cinco y media de la tarde, con una suelta de palomas que recordaba el XXV aniversario de la primera salida del palio, concluyó una brillante estación de penitencia que ha marcado un antes y un después.
No faltaron los estrenos en la cofradía: por un lado, los nuevos faroles de acompañamiento de la cruz de guía, de los Hermanos Delgado; y por otro, la nueva marcha procesional "Aurora, Reina de la mañana", de Pablo Ojeda.


Los caprichos del calendario y las fechas de celebración de la Feria de Abril adelantaron el Pregón de las Glorias de este año, pronunciado por Miguel Andreu (Alberto García Reyes fue el pregonero de la Semana Santa), y con él también fue prematuro el traslado a la Catedral de la imagen encargada de presidirlo en la Catedral. En este caso, fue la Virgen de Guadalupe de San Buenaventura, que salió sólo una semana más tarde de la salida de la Soledad del mismo templo franciscano. El sábado 22 fue el pregón y el segundo domingo de Pascua la procesión de regreso.
Y también fue en abril cuando conocimos el cartel anunciador de las Glorias 2017, obra de Jesús Zurita protagonizada por la Virgen de la Encarnación, de la Hermandad de la Cena (ver).


MAYO
Después de un intenso mes de abril, a mayo tampoco le faltaron importantes citas cofradieras. Por un lado, y siguiendo con los carteles, fue presentado el de Junio Eucarístico, una obra ciertamente compleja, aunque no se puede negar su originalidad, de los hermanos Ignacio y Luis Rubiño (ver).
Por otra parte, la Virgen del Prado de la Hermandad de la Paz, que recuperó el domingo como día de su salida, discurrió por primera vez por el interior del Parque de María Luisa, cruzando la Avenida de la Borbolla (ver).


Además, la Parroquia de la Magdalena vio cómo las imágenes de la Hermandad de Montserrat tenían que volver a ser acogidas en su interior, en este caso por las obras de ampliación de las dependencias de la cofradía anexas a su capilla (ver). Fueron colocadas en el lado derecho del crucero del templo, junto a la capilla de la Hermandad del Calvario, en la que se iniciaron las obras de restauración de su retablo, obligando a sus imágenes a ser colocadas ante el altar de Ánimas, en la nave del Evangelio (ver), para unos días después, ya en junio, pasar al presbiterio alto (ver).
Finalmente, la Hermandad de la Vera-Cruz celebró el LXXV aniversario de la Virgen de las Tristezas con un besamanos extraordinario durante el que la dolorosa estrenó la que será a partir del próximo Lunes Santo su nueva corona de salida, realizada en plata por Joaquín Osorio (ver).



JUNIO
Coincidiendo con la celebración del décimo aniversario de la Coronación Canónica de la Virgen de la O, el día 2 de junio fue bendecido en la fachada de su parroquia un retablo cerámico, obra de Joaquín Soriano. Tras su bendición, se celebró una función solemne conmemorativa (ver).
Seis días después se presentó el cartel del Corpus 2017 editado por el Ayuntamiento y pintado por Manuel Peña, quien reprodujo la imagen del Niño Jesús del Sagrario, pero situado en la propia Custodia de Juan de Arfe en la que va el Santísimo (ver).
Por otra parte, el 10 de junio tuvo lugar la procesión extraordinaria del Santísimo Cristo de los Desamparados del Santo Ángel, con motivo del cuarto centenario de su realización por parte de Juan Martínez Montañés. Salió sobre el paso del Cristo de la Salud de San Bernardo y acompañado por la Banda de la Oliva de Salteras, que interpretó un escogido repertorio musical. Numerosas hermandades formaron parte del cortejo de esta salida que sembró la semilla de un grupo de devotos que se está creando en el convento carmelita de la calle Rioja (ver).


Y sólo cinco días más tarde, llegó el día del Corpus Christi con la procesión de la Catedral (ver), que discurrió por la Plaza de San Francisco bajo unas portadas que reproducían este año la fachada de la Parroquia de San Gonzalo por su LXXV aniversario y por la Coronación Canónica de la Virgen de la Salud (ver). Previamente, fue trasladada al altar ante el Ayuntamiento la Hiniesta Gloriosa (ver y ver), mientras que el Señor de la Cena hizo lo propio hasta el Palacio Arzobispal (ver ver). La nota positiva de este año, un incremento en el número de altares instalados a lo largo del recorrido de la principal procesión eucarística de Sevilla (ver).


También en junio vimos instalado el nuevo cerramiento del atrio de la Basílica de la Macarena (ver), se presentó el cartel de la Coronación Canónica de la Virgen de la Salud (ver) y la Hermandad del Sagrado Corazón de Jesús estrenó la restauración del dorado del frontal de su paso (ver).
Y con una triste noticia alcanzamos el ecuador del año en el último día del mes de junio. El célebre compositor Pedro Morales, autor de marchas como "Esperanza Macarena", "Virgen de la Paz" o "Señorita de Triana", fallecía a los 94 años de edad (ver).


JULIO
La Virgen del Carmen, a través de las diferentes hermandades que tienen a esta advocación como titular, fue protagonista del mes de julio, destacando especialmente la Hermandad del Carmen de Santa Ana, que el mismo día 16 recuperó su tradicional rosario matutino, un culto que dejó de celebrarse cuando la corporación entró en un proceso de decadencia. El rosario tuvo como meta la Capilla de los Marineros, donde se celebró una misa organizada por la Comandancia Naval de Sevilla (ver).


Ese mismo día, la Virgen del Carmen de Santa Catalina vivió su salida procesional, que se vio afectada por las obras, aún no finalizadas, de la calle Matahacas. Por ello, el paso de palio tomó las estrecheces de las calles Sol y Butrón en el inicio de su itinerario tras salir, un año más, de San Román (ver). El día 17, en la salida del Carmen del Santo Ángel, el paso de Santa Teresa presentó por primera vez como iluminación unos candelabros de guardabrisas de madera dorada (ver). Por su parte, la Virgen del Carmen de Calatrava estrenó la finalización de su paso procesional con el dorado de los respiraderos laterales (ver).
Y en cuanto a los besamanos a las imágenes marianas con la advocación carmelita, hay que destacar el de la Virgen del Carmen de San Gil, que no se celebró, como es costumbre, en la capilla de la hermandad, sino en la nave del Evangelio, con la imagen mirando hacia la puerta de la parroquia (ver).


Por otro lado, durante el verano las dos dolorosas de la Parroquia de San Lorenzo presentaron novedades en sus formas de ser vestidas (ver y ver).


AGOSTO
La Virgen de los Reyes celebró este año sus dos besamanos en la Parroquia del Sagrario (ver y ver), debido a las obras de restauración de la urna de plata que cobija los restos de San Fernando, cuyo resultado se pudo ver el día 22 (ver).
En cuanto a la procesión de la Patrona de la Archidiócesis, fue contemplada por un mayor número de personas que en los años inmediatamente anteriores. Ésa fue al menos la sensación de este cronista. Los contadores "profesionales" de masa no se pusieron del todo de acuerdo en este punto. La Virgen de los Reyes salió este año con el manto de color salmón que la duquesa de Osuna donó y que las Hermanas de la Cruz bordaron en oro y sedas en 1929 (ver).


Por otra parte, con motivo del Día de la Virgen, a los besamanos de la Virgen de los Reyes de los Sastres (ver) y la Virgen de la Dormición de Santa Rosalía (ver), y a la exposición a la veneración de los fieles de la Virgen del Tránsito del Pozo Santo (ver), se unió como novedad este año la exposición de la Virgen del Tránsito del Santo Ángel, una imagen del siglo XVII que suele estar en el museo del convento (ver).


Por otro lado, la Hermandad de Pasión estrenó una remodelación de su altar, en la Capilla Sacramental del Salvador, con la Virgen de la Merced y San Juan Evangelista ubicados más cerca del Señor de Pasión (ver).


SEPTIEMBRE
El noveno mes del año se inició con el besapié extraordinario a la imagen del Sagrado Corazón de Jesús de Nervión como culto de despedida antes de su traslado al taller de Pedro Manzano para su restauración (ver). Además, después de cierto desencuentro entre el párroco y la hermandad, la Virgen de la Salud de San Gonzalo estuvo durante todo el mes presidiendo la parroquia desde el presbiterio hasta su subida al paso de palio para su Coronación Canónica (ver).
Por su parte, los titulares de la Hermandad de la Cena fueron trasladados a la Parroquia de San Román la noche del día 4, debido al inicio de las obras de restauración de la Iglesia de los Terceros (ver). En San Román fueron colocados en los que están siendo sus altares de culto provisionales (ver).
Y la Hermandad de la Hiniesta celebró el LXXX aniversario de la bendición de su dolorosa con un besamanos extraordinario a los pies del Cristo de la Buena Muerte, coincidiendo además con el cincuentenario de la muerte de su autor, el imaginero Antonio Castillo Lastrucci. La Hiniesta se presentó a los devotos vestida de hebrea (ver).


También en septiembre tuvo lugar la exposición "Soy de mi Señora Santa Ana: Devociones y culto en Triana", dedicada a DCCL aniversario de la parroquia trianera (ver), y en la Capilla de los Marineros se presentó la imagen del Cristo de las Tres Caídas realizada por Antonio Labrador para una nueva hermandad de Madrid (ver).
Por otro lado, el día 9 se llevó a cabo el regreso de las imágenes de Nuestro Padre Jesús Despojado y María Santísima de los Dolores y Misericordia desde la Parroquia del Sagrario, donde estuvieron durante más de tres meses, hasta su capilla, una vez completadas las actuaciones de desmontaje del retablo mayor para su restauración (ver y ver).


Y el día 14, durante la tradicional procesión sacramental de la Hermandad de San Bernardo, el Santísimo pudo volver a discurrir por el interior de la antigua Fábrica de Artillería, con la que tan vinculada está la corporación por tener entre sus titulares a Santa Bárbara (ver).


En un mes de septiembre de tantísima actividad cofradiera, también hay que señalar el estreno de la marcha "Nuestra Señora de la Luz", de Álvaro Gutiérrez Valle, en la salida de la Virgen de la Luz de San Esteban (ver); la salida de la Virgen de las Mercedes desde la Capilla del Museo con entrada en su capilla, reabierta por fin después de su restauración (ver); la recuperación de una saya procesional para la salida de la Virgen de Valvanera (ver); el adelanto de la salida procesional de la Virgen de la Cabeza de San Juan de la Palma, que fue el último sábado de septiembre, en lugar del primero de octubre, como es habitual (ver); y la celebración en el Ayuntamiento de la muestra de estrenos y donaciones recibidas por la Virgen de la Salud de San Gonzalo por su Coronación (ver).


OCTUBRE
Precisamente, una de las cosas más destacables del mes de octubre fue la Coronación Canónica de la Virgen de la Salud, que el día 7 fue trasladada hasta la Catedral en lo que no se puede considerar traslado, sino toda una salida extraordinaria de diez horas de duración, con entrada por la Puerta de los Palos dos horas más tarde de lo previsto (ver).
Posteriormente, en la Parroquia del Sagrario se celebró un besamanos extraordinario (ver) y el día 14 tuvo lugar la esperada ceremonia de la Coronación, presidida por el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, y la triunfal procesión de regreso a San Gonzalo, que se prolongó durante algo más de trece horas, con la Virgen visitando el Santo Ángel, la Magdalena, la Capilla de los Marineros, Santa Ana y la Capilla de la Estrella, antes de volver al Barrio León (ver).


La Coronación de la Salud llevó a la Hermandad del Rosario del Barrio León a adelantar su salida procesional al domingo día 1, ya que en circunstancias normales tendría que haberse celebrado el sábado 7, día del traslado de la dolorosa de San Gonzalo a la Catedral (ver). Y también se adelantó la salida de la Virgen de Montemayor, que lució un manto cedido por la hermandad matriz de la Patrona de Moguer (ver).
Tres noticias de calado nos llegaron en el mes de octubre. Por un lado, la aprobación del bizarro proyecto de las hermandades del Martes Santo para recorrer la carrera oficial en sentido inverso, de la Catedral a la Campana, en 2018 (ver); por otro lado, el Arzobispado anunció la Coronación Canónica de la Virgen de la Victoria de las Cigarreras para el 13 de octubre de 2018 (ver); y el Consejo escogía a la imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo, de la Hermandad de Torreblanca, para presidir el próximo Vía Crucis de las Cofradías el primer lunes de Cuaresma, para el que saldrá desde la Iglesia de Santa Marina (ver y ver).
Por otra parte, la Virgen de la Encarnación de la Hermandad de la Cena salió desde el Santuario de los Gitanos, hasta donde se trasladó previamente desde su sede provisional en San Román (ver).


Precisamente, la estancia de la Cena en San Román nos dejó este mes otra imagen para la historia, como fue la presencia de la Virgen del Subterráneo junto al Cristo de la Exaltación durante la celebración de los cultos en honor a la Virgen de las Lágrimas (ver). Y en San Andrés, la Virgen de Araceli se mostró en besamanos vestida de Pastora (ver).
Por último, subrayamos el regreso de tres imágenes a sus templos después de sus respectivas restauraciones: la Virgen del Rosario de la Hermandad de las Aguas (ver), el Santísimo Cristo de la Lanzada (ver) y el Cristo de las Tres Caídas de Triana (ver).



NOVIEMBRE
El primer lunes de noviembre supimos que la Virgen de la Hiniesta Gloriosa será la imagen que presida el Pregón de las Glorias de Sevilla 2018, que será pronunciado por Juan Manuel Labrador el día 27 de abril (ver).
Por otro lado, la exposición "Jesús. La fe de un pueblo", dedicada a la Hermandad del Nazareno de La Algaba, apuntó interesantes datos que pueden relacionar a esta talla con las de la Esperanza Macarena y el Señor de la Sentencia (ver).
Además, la Hermandad de los Estudiantes celebró el LXXV aniversario de la llegada de la actual Virgen de la Angustia a la corporación con una exposición conmemorativa y con un besamanos extraordinario en la que la dolorosa de Astorga estrenó un conjunto (que no terno) de manto azul y saya color jacinto bordados en oro por el taller de Santa Bárbara (ver). 


En la noche del jueves 23, ya mejor dicho madrugada del 24, las hermandades de la Madrugá acordaron una serie de modificaciones de itinerario para la Semana Santa de 2018. La Macarena por la Alfalfa, el Calvario por el Museo y el Silencio ampliando el rodeo en su camino de vuelta son los principales cambios, aunque a día de hoy aún no se han pronunciado las autoridades de manera oficial, salvo el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, que dio la enhorabuena a las hermandades por un acuerdo que, en realidad, se interpreta desde el Calvario como un injusto sacrificio para ella misma. La historia interminable (ver)...
Por otra parte, la Hermandad del Amor presentaba el cartel y programa de actos y cultos de celebración del IV centenario de la fusión con la Entrada en Jerusalén (ver), mientras que en San Buenaventura se celebraba con un altar de carácter extraordinario el cincuentenario de la incorporación del Cristo de la Salvación como titular y de la adición del título de Franciscana para la Hermandad de la Soledad (ver).


Por último, después de 18 años, la Virgen de la Medalla Milagrosa salió en procesión por las calles de Ciudad Jardín el domingo anterior a su festividad. La Hermandad de la Milagrosa y la parroquia del mismo nombre llevaron al barrio a finales de noviembre el sabor de una procesión letífica (ver).



DICIEMBRE
Comenzaba el último mes del año con la apertura al público del nuevo museo de la Hermandad de la Esperanza de Triana, situado junto a la Capilla de los Marineros y con una profundidad que llega hasta la calle Betis. La práctica totalidad del patrimonio material de la cofradía se puede contemplar en este nuevo museo, para el que la conocida figura del esclavo etíope ha vuelto a subirse al paso del Cristo de las Tres Caídas (ver).


Por otro lado, la Hermandad de Montserrat trasladó la noche del día 6 al Cristo de la Conversión y a la Virgen de Montserrat de nuevo a su capilla desde la Parroquia de la Magdalena, una vez finalizadas las obras de ampliación de las dependencias de la hermandad (ver).
En cuanto a los besamanos de la festividad de la Inmaculada Concepción, llamaron la atención determinados altares como el de la Virgen del Rocío, con San Juan Evangelista y la Magdalena (ver); el de la Soledad Servita, con diversos elementos de su paso de palio detrás (ver); o el de la Pastora de Santa Marina, con el antiguo resplandor del Espíritu Santo de la Trinidad y dos tallas representando a los padres de la Virgen (ver). Además, hubo dos novedades, ambas en San Román, con el besamanos a la Virgen del Subterráneo en la capilla sacramental de dicho templo (ver) y un besamanos extraordinario a la Virgen del Carmen de Santa Catalina por el CL aniversario de su bendición (ver).


Y en cuanto a los demás besamanos habituales de este mes, sorprendieron el de la Virgen de Guadalupe de las Aguas bajo su palio y con un manto de la Hermandad de las Aguas de Cádiz (ver); el de la Virgen de la Divina Gracia con un manto de camarín de las Mercedes de Santa Genoveva (ver); el de la Virgen del Amor de la Resurrección con la corona procesional de la Virgen de la Aurora (ver); el de la Virgen de Loreto en el presbiterio de San Isidoro con motivo del tercer centenario de su talla (ver); el de la Esperanza de la Trinidad, con un montaje exquisito y con la dolorosa vestida de blanco como cuando en el pasado era conocida como la Esperanza Blanca (ver); y el de la Macarena, que volvió acertadamente al clasicismo de las antiguas postales (ver).


Y un asunto más que debe ser destacado de este mes de diciembre es la vuelta al culto, dos meses y medio antes de lo previsto, de la imagen del Sagrado Corazón de Jesús de Nervión tras su restauración por parte de Pedro Manzano (ver).


Un año muy intenso resumido en este último día. Un año en el que este blog se ha acercado nuevamente a Jerez para vivir y revivir la devoción de la ciudad donde me hice cofrade. Así, 'Periodista Cofrade' visitó la ciudad gaditana el primer domingo de Cuaresma, asistiendo a los besamanos a la Virgen de Amor y Sacrificio (ver), la Virgen de la Encarnación (ver) y el Señor de la Oración en el Huerto (ver) y a los besapiés a Nuestro Padre Jesús Nazareno (ver) y al Señor del Amparo (ver); el Jueves de Pasión, cuando realiza su estación de penitencia la Hermandad de Bondad y Misericordia (ver); el día 29 de julio, con motivo de la salida procesional de Santa Marta (ver); el 24 de septiembre, día de la salida de la Patrona de Jerez, la Virgen de la Merced (ver); en octubre, para ver la exposición conmemorativa del cuarto centenario del voto inmaculista (ver); el día 3 de diciembre, para el traslado a la Catedral de la Virgen de la Amargura en su paso de palio (ver); y el 8, para la procesión extraordinaria de regreso de la Amargura tras clausurar el año dedicado a la mencionada efeméride (ver); y para el besamanos a la Virgen de la Concepción, de la Hermandad de las Viñas (ver).


Con el propósito de continuar un año más, el décimo, con este blog, lo único que queda por expresar son dos deseos: feliz 2018 para todos y que en el nuevo año seamos capaces de profundizar en el mensaje que las imágenes, con todo su poder, nos transmiten desde sus pasos y sus altares, intentando no distraernos con elementos que, aunque también importantes, son estrictamente secundarios. Sin llegar a irse del todo, 'Periodista Cofrade' vuelve en unos días desde una nueva pestaña, la de enero de 2018.