La Hermandad de la Cena de Jerez expuso ayer, lunes, en besapié al apóstol San Andrés. Su festividad se celebró el día anterior, pero al ser domingo la corporación pasó este culto al día siguiente para una mejor organización de la actividad parroquial.
La imagen estaba en el presbiterio bajo de la Parroquia de San Marcos, sobre una estructura forrada en terciopelo rojo. Vestía para ello una túnica de color rojo y un mantolín verde manzana, así como un fajín hebraico. Asimismo, se le dispuso sujetando con sus manos extendidas una red en atención a su oficio de pescador.
Alrededor de San Andrés, había algunas flores de cera, hojas, racimos de uvas y piñas. Además, podíamos ver en jarrones plateados grandes mazos de flores compuestos de rosas rojas y estátice. También se ubicaron un total de ocho blandones con cera roja; cuatro de ellos de madera policromada, los más cercanos al apóstol, y los otros cuatro dorados en los extremos del presbiterio.
La imagen de San Andrés es una de las cinco que conforman el misterio de la Sagrada Cena que no fueron realizadas por Luis Ortega Bru, quien dejó el misterio inconcluso para realizar tiempo después el apostolado de la Cena de Sevilla. Durante años se utilizaron antiguas tallas para representar a esos cinco apóstoles que faltaban hasta que en 2003 se estrenaron los nuevos realizados por los hermanos Ortega Alonso, sobrinos de Bru. Además de San Andrés, hicieron las tallas de San Simón, San Judas Tadeo, San Felipe y Santo Tomás (ver).




























No hay comentarios:
Publicar un comentario